La actividad económica creció 6,4% interanual en octubre, y de esa manera la economía está logrando en lo que va del año una expansión de 9,8%, compensando así la contracción que registró el último año.
En la medición desestacionalizada el avance fue del 0,7%, hilvanando el tercer mes consecutivo de incremento de la actividad en la comparación con el mes previo y descontando el efecto estacional, paradas por mantenimiento, cantidad de días trabajados, etc.
No obstante, la situación macroeconómica está en una situación de mucha fragilidad y se observan parches de corto plazo como precios máximos, freno a las importaciones o cepo cambiario, que son “obstáculos al avance económico”.
Los datos surgen del Índice General de Actividad (IGA) que difundió esta tarde el Estudio Orlando Ferreres y Asociados (OJF), enfatizando que nueve de las once ramas de actividad relevadas terminaron el mes pasado con números positivos respecto de octubre de 2020.
En su análisis, la consultora destaca que en el décimo mes del año, tanto la industria como el comercio mostraron “alguna desaceleración en su marcha”, sin embargo, destacó el “buen impulso proveniente del sector agrícola, gracias al buen comienzo de la cosecha de trigo”.
Se estima que el cereal estrella de la cosecha fina podría llegar esta campaña a rindes récord, en tanto que el crecimiento del sector de minas y canteras, impulsado por el desarrollo de Vaca Muerta, también está traccionando.
Hacia adelante, se espera una recuperación del sector servicios “tiene un amplio espacio para crecer y motorizar a la actividad“, motorizado por una temporada veraniega que se espera recupere su dinamismo, y sin amenazas derivadas de la situación sanitaria en un contexto de mayor vacunación.
Pese a ello, Ferreres advierte que “la situación macroeconómica se encuentra en una situación de suma fragilidad y los parches de corto plazo como precios máximos, limitación de importaciones o el mismo cepo cambiario, son obstáculos al avance económico y no ayudan a resolver los problemas de fondo”, detalló.
En el desagregado por sectores se destacan el Comercio (mayorista y minorista) con una expansión interanual de 19,3%, Minas y canteras (16%), Construcción (11,1%) y la Industria manufacturera (8,6%).
Sólo cayeron Servicios sociales y de salud (-3% interanual) y la Actividad Inmobiliaria, Empresarial y de Alquiler (-5,1%), en tanto que la Intermediación financiera terminó con signo positivo pero marginal (1%).
Fuente El Cronista