Con una incidencia acumulada por encima de 1.800 casos a 14 días, la situación epidemiológica en Madrid sigue complicada. Las autoridades sanitarias madrileñas, no obstante, piden calma: la presión en los hospitales sigue bastante controlada, y sus previsiones les indican que el pico de esta sexta ola podría llegar en una semana, y después tener una bajada tan rápida como fue la subida. No obstante, al ser estos días de celebración y de muchas reuniones familiares, están vigilantes por si resulta necesario tomar alguna medida de cara a la vuelta al cole, tras las vacaciones navideñas. Los responsables de la Consejería de Sanidad recuerdan que es en los centros educativos donde se concentra el mayor número de brotes, especialmente en las edades más tempranas. Aunque la vacunación infantil puede rebajar estas cifras –ya hay 96.000 niños vacunados en Madrid–, en la dirección general de Salud Pública siguen monitorizando la situación y decidirán la próxima semana si toman alguna medida para la vuelta al cole. El viceconsejero de Asistencia Sanitaria y Salud Pública, Antonio Zapatero, recuerda que se están realizando hsta 300.000 consultas diarias en Atención Primaria y más de 90.000 test al día. La variante Ómicron es sumamente contagiosa: una persona infectada puede contagiar a entre 6 y 10 más. No obstante, en esta ola el nivel de ingresados en hospital se ha reducido un 86 por ciento. La vacunación seguirá siendo prioritaria: desde hoy se abre la agenda de autocitas para la dosis de refuerzo a personas a partir de 45 años, y para los niños a partir de 5 años.
Fuente ABC