Por Cristina Seguí-Especial Total News Agency-TNA-
El mayor miedo de Teresa, la joven que fue abusada en 2017 por el marido de Mónica Oltra, le ha tocado finalmente a la puerta de casa. “Yo sólo tengo miedo de que me quiten a mis hijos y se los lleven a un centro tutelado”, el de 9 meses y el que viene en camino. Así lo explicaba el miércoles pasado al ser entrevistada por este medio en el Ateneo de Valencia.
Ese día ha llegado tres meses después de haber sido despedida de su lugar de trabajo por la gerente y por la directora de recursos humanos de la Generalidad Valenciana aprovechando la reversión de la gestión privada a la pública del Hospital de Torrevieja, donde el grupo Ribera Salud le dio un empleo a Teresa y al padre de su hijo. Después de la persecución de Oltra hasta dejarle sin empleo, ahora va a por su hijo.
“Todo ha empezado al pedir ayudas económicas para mi bebé y una vivienda para poder vivir. Al principio esta asistente social me traía comida y pañales a casa. Incluso me pagó dos noches de hotel cuando no tenía donde ir, pero cuando me he confiado a empezado a amenazarme con quitarme a mi hijo. Me dicen que no estoy capacitada para cuidarle, que está en peligro conmigo porque soy incapaz de hacerlo conmigo misma”.
Junto a ella asiente Paloma, otra joven de 19 años que vive con Teresa, con Eugenio, el familiar que les da cobijo, y con el padre del hijo de Teresa. Paloma ha sido testigo de las coacciones y ha atendido varias llamadas de quienes identifica como una representante de Mensajeros por la Paz en la Comunidad Valenciana, y dos asistentes sociales de la Generalidad valenciana, que decían querer ayudar a Teresa: “Nos amenazan con que el bebé no va a recibir asistencia sanitaria si no lo tutela una asistente social y si Teresa sigue hablando con la prensa. Nos dice que no salga en la televisión nunca más. Vinieron a ver la casa. Nos exigen que les mandemos fotos de la habitación si cambiamos la cama del bebé de sitio”.
A lo que Teresa añade: “Me dicen que les comunique todos mis movimientos si no quiero perder al bebé y que lo metan en un centro. Que si voy al juzgado he de avisarla”.
Al igual que la víctima de Mónica Oltra y su marido, Paloma ha pasado la mayor parte de su vida en centros tutelados, donde hace unos años fue víctima de “violencia de género” con sentencia, por lo que recibía una ayuda de algo más de 400 euros que acaban de retirarle sin darle ninguna explicación hace tres meses, justo cuando Teresa, su bebé, y el padre de éste fueron a vivir con Eugenio, con su mujer, y con el hijo de ambos, quien recibe una exigua ayuda de 150 euros por una minusvalía del 69%.
Mensajeros por la Paz es la ONG fundada en 1962 por el famoso padre Ángel, habitual de todos los saraos mediáticos que presume de no tener ánimo de lucro, lo que no parece cuadrar con las subvenciones públicas recibidas desde la Generalidad Valenciana en los últimos años.