Su rol de líder, como principal relevo del entrenador Stefano Pioli, es esencial, pese a que el goleador, que ha pasado por Ajax de Amsterdam, Juventus, Inter, Barcelona, PSG, Manchester United y Los Ángeles Galaxy, jugó finalmente poco la pasada temporada, afectado por varias lesiones en los tendones de Aquiles y en la rodilla izquierda.
Tras terminar la temporada, sufriendo y frustrado por un tiempo de juego demasiado corto, se sometió a una operación quirúrgica en mayo para reconstruir su ligamento cruzado anterior, lo que se hacía indispensable tras meses de calvario.
Ahora deberá respetar una convalecencia de siete u ocho meses, lo que le impedirá jugar antes de 2023.
Aunque el Milan le ofrece un año suplementario, su salario ha sido ampliamente recortado y tiene varias partes variables teniendo en cuenta sus partidos y actuaciones la próxima temporada, según la prensa italiana. Trascendió que el sueco pasará de cobrar 7 millones a 1.500.000 de euros.
Y para respaldar al francés Olivier Giroud en punta, el club se reforzó a principios de julio con la adquisición del belga Divock Origi.
Con esta prolongación, Ibrahimovic retrasa un poco más el momento de colgar los botines, para después, según algunos medios de comunicación, reconvertirse en dirigente en el club ‘rossonero’.
Fuente Ambito