Las víctimas fallecidas en el accidente fueron una mujer de 30 años y una niña de tres años. Un número desconocido de personas seguían atrapadas debajo del autobús.
La policía de Israel, los bomberos y los paramédicos se encontraban en el lugar. Los informes iniciales indicaron que el conductor del autobús no estaba en el vehículo cuando rodó cuesta abajo y llegó a la parada de autobús.
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«Este es el segundo accidente de este tipo en el vecindario esta semana», dijo Raphael Poch, portavoz de United Hatzalah. «En este caso, un autobús se estrelló contra una tienda. Debido a la naturaleza del incidente, la Unidad de Psicotrauma y Respuesta a Crisis ha sido enviada y está activa en la escena brindando estabilización emocional y psicológica a los testigos».
“Los choferes de buses están colapsando y la mayoría maneja muchas horas todos los días debido a la escasez de más de 5,000 choferes. Los buses se han convertido en una bomba de relojería debido a la creciente escasez. Es hora de que los jefes del Ministerio de Transporte tomen medidas esto en serio. Los conductores y pasajeros no deben dar su vida”, dijo el jueves el Sindicato de Conductores de Autobuses.
El incidente se produce solo dos días después de que un autobús Egged se desviara hacia los peatones y se estrellara contra un sitio de construcción en la calle Yirmiyahu de Jerusalén el martes por la noche, matando a un hombre israelí de 70 años e hiriendo levemente a otro peatón.
Jerusalem Post
Fuente Vis a Vis