A los judíos locales les gustaría ver que esta tradición se detuviera.
En una nueva edición del clásico escocés de Glasgow, entre Rangers y Celtic, aparecieron banderas israelíes y palestinas flameando en las tribunas. Aunque pocos son los judíos que viven en dicha ciudad escocesa, pueden verlas en cada juego de Old Firm.
El fenómeno de la bandera israelí-palestina comenzó hace 15 años. Esto deja a los fanáticos judíos escocesas en un trance de la división política de la que les gustaría salir mientras están en un estadio de fútbol.
“Queremos que se detenga”, comentó Paul Edlin, del Consejo Representativo Judío de Glasgow. “A los clubes no les gusta, pero no impedirán que suceda. No hay razón para enarbolar las banderas de los países en los partidos de fútbol por ningún motivo, ni israelí ni palestino”.
“Existe esta agrupación que tiene esta narrativa de que Celtic tiene que ver con el republicanismo irlandés y que hablan por Celtic”, dijo Lord Ian Livingston, un miembro judío del parlamento británico y exmiembro del directorio de Celtic. “Si está diciendo que se pone del lado de los oprimidos contra los fuertes, de las fuerzas antiimperialistas contra el imperialismo, entonces este es un salto fácil para ellos”.
En Glasgow, la Brigada Verde recaudó miles de libras para organizaciones benéficas palestinas y desde 2019 apoyó una academia de fútbol en Judea y Samaria (Cisjordania). La misma se llama Aida Celtic y se ubica en el campamento de refugiados de Aida cerca de Belén.
Los hinchas del Celtic comenzaron a flamear banderas palestinas a fines de la década del 2000 en el estadio Ibrox del Rangers. La respuesta instantánea de los rivales fue izar banderas israelíes entre las Union Jacks y las cruces de Irlanda del Norte.
Alrededor de 30 judíos asisten a los partidos del Celtic y la creciente visibilidad de la Brigada Verde llamó la atención. La UEFA multó repetidamente al equipo británico por exponer la bandera palestina.
“No se lo pone fácil a los muchachos judíos que apoyan al Celtic”, dijo Gerard Minster, de 52 años, un hincha acérrimo del club que es judío antes del partido del sábado, en el que su equipo derrotó a los Rangers 4-0. “Cada vez que hay problemas en Israel y Palestina, parece volver a levantar la cabeza. Puede ser un desafío, pero todo es parte de ello, y no me desalienta a apoyar al Celtic”.
Fuente Aurora