El gobierno iraní volvió a acusar infundadamente a Israel en medio de las negociaciones nucleares.
Irán afirmó este lunes que está «listo para cooperar» con la agencia nuclear de la ONU (OIEA), pero pidió al organismo internacional que «no se deje influir por Israel».
“Estamos listos a cooperar con el OIEA, pero además de compromisos tenemos derechos. La agencia debe comprometerse a un mandato libre de presiones, incluidas las de Israel”, dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Naser Kananí, en su rueda de prensa semanal.
El diplomático acusó a Israel de “jugar un papel destructivo en las negociaciones para salvar el JCPOA (siglas en inglés del acuerdo nuclear)”. Kananí advirtió además que las políticas futuras del país persa se “basarán en lo que ocurra hoy en la Junta de Gobernadores del OIEA”, que se reúne este lunes.
“Cualquier repetición de medidas poco constructivas llevará a resultados no constructivos”, aseguró.
Kananí hacía referencia así a la resolución que la Junta de Gobernadores del OIEA aprobó en junio crítica con Teherán por su falta de transparencia sobre trazas de uranio encontradas en tres lugares que Irán no había declarado.
Teherán respondió entonces con el apagado de unas 40 cámaras de verificación del acuerdo nuclear. Respecto al acuerdo nuclear, el diplomático afirmó que Teherán espera que Estados Unidos y la Unión Europea actúen de forma “constructiva” para lograr un pacto.
El funcionario volvió a criticar la advertencia en la que Francia, Alemania y Reino Unido afirmaron el viernes que han llegado «al límite» de su “flexibilidad” en las negociaciones nucleares.
La declaración conjunta de los portavoces de los ministros de Exteriores de los tres países europeos constató la «ausencia de cooperación» de Irán con el OIEA mientras continúa su «escalada nuclear”.
El OIEA detalló la semana pasada en un informe reservado que Irán aumentó en tres meses, hasta los 55,6 kilos, sus reservas de uranio enriquecido al 60%, una pureza cercana al nivel necesario para fabricar bombas atómicas.
Además, el organismo afirmó que su capacidad de verificación del programa nuclear iraní está «seriamente afectada» por la decisión de Teherán de desconectar cámaras de vigilancia y limitar las inspecciones.
El acuerdo nuclear de 2015 firmado por Irán, Alemania, Francia, Reino Unido, Rusia, China y Estados Unidos limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones.
En 2018, el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, abandonó el pacto y durante los últimos 16 meses Irán negocia con los países occidentales la restauración del mismo.
La Unión Europea (UE) presentó en agosto una última propuesta para salvar el acuerdo, a lo que Irán y Estados Unidos han presentado sus comentarios.
Tras días de optimismo ante un posible cierre del acuerdo, las negociaciones parecen estancadas de nuevo.
Con información de EFE
Fuente Aurora