MADRID, España.- El primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, ordenó a los conductores estatales “apoyar a la transportación de pasajeros”.
“En medio de la compleja situación que vive nuestro país, es imprescindible el uso del transporte estatal en apoyo a la transportación de pasajeros. Por tal motivo, indiqué al ministro de Transporte organizar la correcta aplicación de la medida correspondiente”, dijo Marrero Cruz este miércoles a través de Twitter
En su publicación indicó que todos los jefes a todos los niveles “deben garantizar el cumplimiento de esta disposición, cuya violación se considerará una indisciplina grave”.
Los Jefes a todos los niveles deben garantizar el cumplimiento de esta disposición, cuya violación se considerará una indisciplina grave.
Como servidores públicos, nuestro mayor compromiso es con y para el pueblo.#SaldremosAdelante pic.twitter.com/Me9MQbAgWK
— Manuel Marrero Cruz (@MMarreroCruz) February 1, 2023
Esta medida ha sido retomada en varias ocasiones por el régimen, incapaz de dar solución a la crisis del transporte que durante décadas ha afectado a los cubanos.
En los años 90 Fidel Castro estableció las paradas obligatorias de todos los vehículos estatales en puntos de recogida y lugares donde usualmente se aglomeraba la población para acceder a las rutas de ómnibus.
Para ello se estableció el cuerpo de inspectores denominados “amarillos”, por el color de su uniforme, que posteriormente pasaron a conocerse como “azules”.
Aunque la ineficiencia del transporte en Cuba no es nada nuevo, el último año ha experimentado una de sus peores crisis.
Al cierre del 2022 el régimen reconoció que la transportación de pasajeros en Cuba había tenido “un marcado descenso”, con los Ómnibus Nacionales cubriendo solo el 43 % de las salidas interprovinciales que se realizaban antes de 2019.
Un informe presentado por Eduardo Rodríguez Dávila, ministro del Transporte, indicó que para el 2022 se había estimado alcanzar los 1 733 millones de pasajeros transportados, un 17 % inferior a lo logrado antes de la pandemia. “No obstante, el plan solo se cumplió al 59 %”.
Ya desde mediados del 2022 las autoridades del sector habían indicado que la capital del país atravesaba la peor crisis en los servicios del transporte público de la última década. En esa fecha la Empresa Provincial de Transporte de La Habana, el principal operador, mantenía en funcionamiento solamente 442 medios que trasladaban a diario más de 580 000 personas, cifra que dista de los 780 ómnibus programados hace cuatro años.
Fuente Cubanet.org