
MIAMI, Estados Unidos. — El régimen cubano denunció este miércoles las protestas y mensajes políticos aparecidos en el LoanDepot Park durante la primera semifinal del Clásico Mundial de Béisbol entre las selecciones de Cuba y Estados Unidos.
Una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) calificó las manifestaciones contra la dictadura como “actos de hostilidad contra el equipo Cuba incitados por las autoridades de Miami”.
“Se produjeron lamentables y peligrosos incidentes en contra del equipo cubano que participó en certamen, que Cuba denuncia de forma enérgica”, señala el texto en referencia a las protestas del exilio cubano.
“Con el claro propósito de desestabilizar a nuestros jugadores, se realizaron actos reiterados de diversa naturaleza contra ellos, contra la delegación que los acompañó y contra los seguidores de la escuadra cubana en el estadio. Estos incluyeron agresiones directas, amenazas, uso de lenguaje ofensivo y vulgar, ataques lesivos a la moral del equipo de Cuba y otros incidentes dirigidos a menoscabar el ánimo de los atletas y perjudicar el espectáculo”, apunta el comunicado, que ha sido difundido por el aparato de propaganda estatal.
“No se hicieron cumplir las reglas de orden y conducta establecidas por el estadio, en lo que hubo aparente complicidad de ciertos representantes y personal de esa instalación deportiva y de autoridades locales, en particular, de los encargados del orden y la seguridad”, añade la nota.
Según el MINREX, “se lanzaron objetos contra los peloteros y sus familiares, entre los que se encontraban mujeres, niños y ancianos, así como contra miembros de la delegación y representantes de la prensa cubana, y también contra espectadores que apoyaban al equipo de Cuba”.
La Cancillería cubana también hizo referencia a los tres cubanos que se lanzaron al terreno de juego en protesta contra la dictadura y en favor de los presos políticos, a los que calificó como “supuestos espectadores”.
“Ingresaron en tres ocasiones al terreno durante el partido e interrumpieron el juego, lo que puso en peligro la seguridad y estabilidad de los jugadores del equipo cubano. Se profirieron reiteradas ofensas y amenazas a los atletas, en alta voz, cuando a estos le correspondía su turno al bateo o cuando se preparaban para entrar en el juego, como le ocurrió al lanzador cubano Frank Abel Álvarez mientras calentaba en el bullpen, lo cual atenta contra las reglas de las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) y cualquier noción de deporte limpio”.
La declaración del MINREX también condenó los carteles y pancartas aparecidos durante el partido con mensajes de “Libertad para los presos políticos”, “Abajo la dictadura” y “Díaz-Canel singao”.
“Se mostraron constantemente carteles con consignas políticas, lenguaje obsceno y vulgar, irrespetuosos hacia atletas y público en general, que interfirieron en el disfrute del juego. De la misma forma, se utilizó ropa con frases e imágenes ofensivas, de contenido político, no permitidas por las reglas de la instalación deportiva”.
El MINREX sostuvo, además, que “se violó repetidamente el Código de Conducta para Huéspedes establecido para el estadio, a partir del consumo de bebidas alcohólicas de manera irresponsable y la violación de los asientos asignados”.
El organismo estatal aseguró que todas esas situaciones condicionaron la actuación del Team Asere, apabullado por Estados Unidos con marcador de 14 carreras por dos.
Fuente Cubanet.org