MIAMI, Estados Unidos. — Este domingo se desarrollarán en Cuba las “elecciones” de los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, cuyas candidaturas ya han sido definidas, y no precisamente por la ciudadanía.
Básicamente, los cubanos irán a las urnas para votar por los 470 legisladores que, supuestamente, los representarán durante los próximos cinco años en el Parlamento, entidad que apenas se reúne dos veces al año.
Son 470 escaños y 470 candidatos, por lo que los votantes no elegirán a nadie, sino que ratificarán la decisión de la plana mayor del régimen, impuesta a contracorriente de los intereses del pueblo, hecho demostrable desde el mismo momento en que son excluidos de las candidaturas ciudadanos con posiciones políticas contrarias a la dictadura.
Con tal de imponer a sus candidatos, el régimen de la isla maneja las nominaciones a su antojo. En ese sentido, es común que un alto funcionario radicado en el municipio habanero de Playa termine representando a un municipio cualquiera de la geografía cubana, aunque allí nadie le conozca.
El castrismo de continuidad se jacta de llevar adelante un ejercicio democrático refrendado en la celebración de asambleas en los 168 municipios del país con la asistencia de los delegados de circunscripción que previamente fueron propuestos y elegidos directamente por la población en las comunidades.
Según el Consejo Electoral Nacional (CEN) —entidad controlada por la dictadura—, entre los nominados el 20% son jóvenes menores de 35 años y el 53% mujeres. El promedio de edad de los diputados es de 46 años y más del 95 por ciento son graduados universitarios.
En las “elecciones” del domingo más de ocho millones de cubanos están llamados a las urnas para votar, de ellos 1,5 millones viven en La Habana.
Para poder ser ratificados, los diputados deben tener el respaldo de más del 50 % de los votos emitidos, mientras que el régimen se guarda varios recursos legales para completar aquellos puestos que puedan quedar vacantes.
Todos los candidatos fueron seleccionados por las llamadas organizaciones de masas y aprobados para las Asambleas Municipales del Poder Popular, donde son mayoría los militantes del PCC y de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).
Fuente Cubanet.org