En las últimas semanas, los funcionarios chinos parecen estar coqueteando con la posibilidad de que China se convierta en un mediador en los conflictos regionales y logre la tan esperada paz entre las líneas duras de los bandos.
Por Galia Lavi
Detrás de esta dinámica se encuentra la Iniciativa de Seguridad Global, lanzada recientemente por el presidente Xi Jinping.
Los altos funcionarios están tratando de verter contenido real en esta iniciativa, mientras se jactan del éxito de la intervención china en el acuerdo entre Arabia Saudita e Irán.
Esta semana, el enviado especial de Beijing para asuntos euroasiáticos completó una gira por Europa, en un intento por promover la iniciativa de paz del presidente chino para poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania.
Si bien la gira no rindió frutos sustantivos, sí fortaleció la nueva marca de China como posible mediador entre las partes.
Los funcionarios chinos también se plantearon el conflicto palestino-israelí como candidatos para la mediación.
¿Puede China servir como un mediador justo en este conflicto?
Un breve repaso a la actividad china en este contexto plantea serias dudas al respecto.
Pekín es muy activo en el Consejo de Seguridad de la ONU y es el primero en pedir que se convoquen discusiones especiales y que se condene a Israel cada vez que hay una escalada entre las partes.
Las declaraciones de altos funcionarios chinos también dejan claro, sin lugar a duda, el sesgo chino a favor de la parte palestina.
Así, cuando se dispararon cohetes contra Israel antes del inicio de la Operación Escudo y Flecha, el Ministerio de Exteriores de China subrayó quién a sus ojos era la causa principal de la escalada, cuando llamó a «todas las partes, y especialmente a Israel», a ejercer moderación y actuar para reducir las tensiones.
Además, el portavoz chino no consideró adecuado condenar o incluso abordar el lanzamiento de cohetes desde Gaza, a pesar de que en los ataques tres ciudadanos chinos que trabajaban en Israel resultaron heridos, uno de ellos de forma moderada.
Mientras ignoraba el daño a los civiles, el embajador adjunto de China ante la ONU consideró oportuno llamar la atención sobre la reciente visita al Monte del Templo del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, y pidió a Israel que detuviera las «provocaciones» y la «invasión» de tierras y recursos palestinos.
Si China está interesada en mediar entre Israel y los palestinos en el futuro, sus líderes deberían cambiar esta política.
Fuente: INSS – The Institute for National Security Studies
Fuente Aurora