Buenos Aires- 7 de enero de 2025-Total News Agency-TNA- Un reciente informe revela el fortalecimiento de la colaboración entre Irán y Venezuela, evidenciado por la adquisición de propiedades en el país sudamericano por parte de altos funcionarios iraníes.
Además, el régimen de Caracas ha ofrecido asilo político a miembros de la élite iraní en caso de una crisis interna en Irán, lo que subraya la profundidad de esta relación.
Un Vínculo en Expansión
La alianza entre ambos países ha evolucionado en las últimas décadas, incorporando una notable cooperación militar y económica que podría alterar la estabilidad regional. Irán ha establecido una base de desarrollo de drones en la base aérea El Libertador, donde también se llevan a cabo entrenamientos para el personal militar venezolano.
Este programa incluye la producción y capacitación en el uso de diversos vehículos aéreos no tripulados (UAV), destacándose modelos como el ANSU-100 (Mohajer-2), el ANSU-600 (Mohajer-6) y el ZAMORA V-1 (Shahed-131). Estos drones, diseñados para misiones de reconocimiento y ataque, representan un avance significativo en la capacidad militar de Venezuela, respaldada directamente por Teherán.
Capacidades Militares Avanzadas
El ANSU-600 (Mohajer-6) está equipado con el sistema de armamento QAEM-5, permitiendo realizar ataques aire-superficie de alta precisión. Por su parte, el ZAMORA V-1 (Shahed-131) es utilizado para misiones de ataque unidireccional, convirtiéndose en una herramienta estratégica para operaciones ofensivas. Irán no solo ha proporcionado estos drones a Venezuela, sino que también busca expandir su influencia al venderlos a otros actores en la región, lo que podría desestabilizar aún más el panorama geopolítico en América Latina.
Colaboración Económica y Política
La cooperación entre Irán y Venezuela no se limita al ámbito militar. La Fuerza Quds, unidad de élite de la Guardia Revolucionaria de Irán, ha establecido una presencia activa en el país sudamericano. Delegaciones iraníes, que incluyen ejecutivos de Mahan Air y otros colaboradores de la Fuerza Quds, han mantenido reuniones con altos funcionarios del régimen venezolano para fortalecer los lazos económicos, generando ingresos que financian actividades consideradas terroristas por varios países.
Entre las actividades conjuntas destaca el uso de Mahan Air para vuelos directos entre Caracas y Teherán, utilizados para transferir oro venezolano a cambio de petróleo iraní, en un esquema que contraviene las sanciones internacionales impuestas a ambos países. Posteriormente, el oro es vendido en mercados de Turquía y otros países de Oriente Medio, generando fondos destinados a financiar las actividades de la Fuerza Quds.
Lazos Estratégicos y Asilo Político
A lo largo de los años, la relación entre Irán y Venezuela ha sido consolidada mediante acuerdos en sectores clave como la energía y la industria, permitiendo a ambos países sortear las sanciones internacionales. El regreso de Alex Saab, empresario colombiano vinculado al régimen de Maduro, ha sido un factor clave en la cooperación económica y estratégica entre Caracas y Teherán.
En octubre de 2022, una delegación del Ayatollah Alí Khamenei visitó Venezuela, donde altos funcionarios del régimen ofrecieron garantías de asilo político para ellos y sus familias en caso de un “evento desafortunado” en Irán. Este gesto resalta la profundidad de la relación, que abarca aspectos económicos, militares y políticos.
Preocupaciones Internacionales
La creciente presencia de Irán en Venezuela ha suscitado preocupación en la comunidad internacional. La venta de drones y la capacitación militar podrían tener implicaciones significativas para la seguridad regional, mientras que las actividades económicas conjuntas plantean desafíos para las sanciones internacionales y los esfuerzos por contener las actividades de la Fuerza Quds.
Un gran número de líderes del régimen venezolano mantiene un contacto constante con el embajador de Irán en Caracas, Hojat Soltani, quien coordina todas las actividades iraníes en el país. Soltani centraliza las demandas de tecnología, petróleo y defensa, y fue clave en la organización de la reciente cumbre entre el ministro de Defensa de Irán, Aziz Nasirzadeh, y Delcy Rodríguez, donde se discutieron temas de cooperación recíproca y la situación del crudo.
Conclusiones
La relación entre Irán y Venezuela no solo refuerza la posición de ambos países frente a las sanciones internacionales, sino que también plantea interrogantes sobre el impacto de esta alianza en la estabilidad de América Latina y en el equilibrio de poder en la región. Esta cooperación esta destinada a influir en el futuro geopolítico de la región.