Falta de entrenamiento, excesivas horas de trabajo bajo presión en territorios altamente hostiles, gendarmes retirados o con los años de servicio cumplidos que taponan cargos y ascensos, siendo junto al kirchnerismo responsables de distintos favoritismos y hechos dudosos. Por Darío Rosatti
Los hechos sucedidos en la Villa 1.11.14, demuestran una vez más la ineficiencia del Estado para abordar temas que hacen a la seguridad dentro de grandes asentamientos urbanos, no hay dudas que desde hace más de una década los nuevos desafíos a los que se ha enfrentado la Gendarmería en lo referente a la seguridad urbana, han resultado perjudiciales, no solo para su imagen Institucional, sino que mostro la preparación que tienen los funcionarios para afrontar estos desafíos. La Gendarmería no fue diseñada para sus actuales funciones y tampoco se la preparo para ello.
Las nuevas autoridades deberán prestar atención a estos hechos.
La muerte en una casilla plástica por un disparo, del Gendarme Centeno, en el barrio denominado “Fuerte Apache”, mostro como esos bravos Gendarmes también estaban a merced de la delincuencia común.
Ya no se habla de la lucha contra el Narcotráfico, sino que la Gendarmería se ve invadida por operativos contra el Corte de Calles, y especialmente la Seguridad Ciudadana, dejando de lado la investigación de delitos complejos entre ellos el Narcotráfico. Comentan a Total News desde adentro de la fuerza de seguridad.
Como comenta Pagina 12 en su título “La Próxima Ves te reventamos la Cabeza”, se puede observar como personas que usan el uniforme y trabajan 24 horas de servicio por otras 24 de descanso, en oportunidades, más allá del problema de vivir lejos de sus lugares de trabajo, hacen que estén en condiciones de desprotección del propio Estado, quien solo investiga a quien está en el terreno, desprendiéndose de investigaciones serias (tal vez por falta de profesionales) que busquen conocer los verdaderos problemas que tienen los miembros de la Fuerza, resulta raro que nadie se pregunte:
¿Cuándo recibió entrenamiento “real” de tiro con escopeta el Gendarme que intervino en este lamentable hecho?
¿Qué tipo de instrucción tuvo en este aspecto, y donde ya que según fuentes de la propia institución, la Gendarmería no cuenta con polígonos habilitados por el RENAR, para preparar a los casi 39.000 efectivos.?
Por otra parte no debe dejarse de mencionar aspectos que hacen a estudios de la psiquis de quienes diariamente enfrentan hechos de tal magnitud, como por ejemplo el síndrome de burnout, que es un padecimiento que a grandes rasgos consistiría en la presencia de una respuesta prolongada de estrés en el organismo ante los factores estresantes emocionales e interpersonales que se presentan en el trabajo, que incluye fatiga crónica, ineficacia y negación de lo ocurrido.
Ahora bien, Dentro de las filas de la Institución se están gestando nuevas circunstancias que propician hechos como los ya vividos en Octubre del año 2012, donde luego de numerosos abusos del Estado hacia quienes nos protegen, llevaron a una marcha sin precedentes y una protesta del personal de la Fuerza por las numerosas irregularidades en lo referente al pago de suplementos en negro, por lo cual la mayoría de los Gendarmes hoy tienen un promedio de 5 juicios contra el Estado, el cual les adeuda a las distintas fuerzas la suma de $ 2.300 millones.
Como corolario de esto, el personal ve día a día como algunos superiores siguen haciendo abuso de sus cargos, donde resaltan los siguientes casos, según pudo determinar TNA:
El ingreso en calidad de convocado para volver a trabajar en la Gendarmería del Comandante General José Luis Pibernus, quien fue uno de los responsables como Director General de Recursos Humanos de la Fuerza del despido de cientos de Gendarmes por la marcha ya mencionada, siendo que en la actualidad el mismo Pibernus esta beneficiado por Decretos posteriores, que en forma parcial intentaron salvar los problemas de haberes y que a la fecha la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien cuando era Diputada de Unión Para Todos (2012) apoyaba la protesta, hoy enfrenta el desafío de cambiar las cosas, pero a la luz de los hechos, lejos está de hacerlo, tal vez por no tener gente a su lado profesionales que se atrevan a cerrar temas que desde hace años afectan a quienes nos protegen.
Por otra parte el reingreso a las filas de la Institución del Comandante General Oscar Aranda, no hace más que mostrar cómo han operado los miembros del Kirchnerismo, ya que era Aranda quien en su paso por el Operativo Cinturón Sur, supo entender las necesidades de Berni para potenciarse en el marco de la seguridad interior, siendo su aliado, y este último, artífice de su ascenso a General en la era Kirchnerista, junto a su segundo al mando el actual Comandante General Claudio Brilloni, (Particularmente a cargo del Área Inteligencia e Investigaciones Judiciales de la Fuerza) quien estuviera a cargo del plano táctico de la búsqueda de los tres fugitivos de Santa Fe con los resultados de público conocimiento.
Aranda y Pibernus, junto a otros estarían siendo nombrados para trabajar en el Instituto Universitario de Gendarmería Nacional, dejando así a numerosos Oficiales de la Fuerza que poseen los requisitos académicos para estar allí privados de ocupar dichos cargos.
Pululan aún Oficiales Superiores como el Comandante Mayor Mungai quien estuviera involucrado hace unos años por la compra irregular de munición prohibida para su uso, y que actualmente, pese a haber superado los 35 años de servicio, y está en condiciones de ser retirado y dar lugar a los que vienen atrás, ocupa el cargo de Director de Planeamiento en la Dirección Nacional, teniendo llamativamente a su hija, una Gendarme de menos de 1 año de antigüedad a su cargo – si trabajando en su oficina en horarios más que acomodados (quien cuenta con una beca de estudio llamativamente otorgada por la Gendarmería para estudiar en una Universidad Privada, pese a que hay Oficiales Jóvenes y Suboficiales que no pueden acceder a estas) y también está su hijo un recientemente ingresado a la Fuerza que “lógicamente” trabaja en el edificio centinela lejos de sus camaradas que diariamente trabajan a la luz del sol y la luna en la Villa 1.11.14. Estas situaciones están lejos de lograr el espíritu de cuerpo que necesariamente necesita una fuerza de seguridad. Sin duda estas situaciones no le fueron enumeradas a la Ministro de Seguridad.
La idea de sueldos totalmente desequilibrados, donde un Oficial de la Policía Metropolitana cobra casi el doble del sueldo que un Gendarme, siendo que los primeros están sometidos a un régimen de 30 horas semanales en lugares casi privilegiados, frente al Gendarme que pasa 24 horas de servicio real en la villa 1.11.14 y otros lugares de difíciles características, muestra una vez más como se prepara un clima tenso y de gran desigualdad en las Instituciones. No es casual que la policía bonaerense le esté exigiendo a la flamante Gobernadora María Eugenia Vidal, que proceda a ajustar los sueldos del personal policial a los de la Policía Metropolitana.
Sin duda lo relatado aquí, es solo una pequeña parte del porque una fuerza de seguridad, que debería ser de excelencia, hoy se encuentra a punto de ebullición.
En las alturas del poder, se hace difícil escuchar.
dariorosatti@totalnewsagency.com