
WASHINGTON.- Funcionarios electorales federales y estatales de Estados Unidos negaron este jueves que haya evidencia de pérdida o cambio de votos, o de alteración de los sistemas de votación en las elecciones de la semana pasada.
La declaración contradice las afirmaciones de los republicanos y de la Casa Blanca, que desde las elecciones sostienen la estrategia judicial y mediática de denunciar la integridad de los comicios en varios estados.
“La elección del 3 de noviembre fue la más segura en la historia de Estados Unidos”, dijeron en un comunicado. “No hay evidencia de que algún sistema de votación haya eliminado o perdido votos, haya cambiado votos o haya sido alterado de alguna manera”, indicaron.
Trump basa sus denuncias en dos argumentos. Por un lado, sostiene que los votos por correo que llegaron después del 3 de noviembre, el día electoral, son ilegales y deben ser descartados.

Por el otro, acusa a las autoridades electorales de varios estados de haber impedido el trabajo de los fiscales republicanos en el conteo y exigen un recuento, que según dice terminará dándole el triunfo.
El primer planteo ha sido insistentemente rechazado por los tribunales, desde Wisconsin a Michigan y Georgia. El segundo es refutado por la realidad.
De acuerdo con un estudio realizado por la organización Fair Vote, entre 2000 y 2015, de entre 4697 elecciones en todos los niveles de Estados Unidos, hubo 28 recuentos. Solo tres desembocaron en la reversión del resultado y la corrección final en el número de votos promedió los 282 sufragios.
Algunos republicanos, incluido el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, apoyan los esfuerzos de Trump para luchar contra los resultados de las elecciones. Pocos en el Partido Republicano reconocieron la victoria de Biden.
Agencia AFP