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El Gobierno creía que estaba todo solucionado para que un avión de Aerolíneas Argentinas viajara esta noche a Rusia en busca de las vacunas contra el coronavirus que fueron compradas a ese país. Pero, los planes cambiaron.
El vuelo fue atrasado por 16 horas y reprogramado para este martes a las 19.30 para que de esta manera el avión aterrice en horario diurno. Dado que, según pudo confirmar LA NACION a través de fuentes con acceso al plan de vuelo, “Rusia no lo autorizó porque había que sacar un permiso especial para aterrizar en ese país de noche”.
No obstante, no se animaron a confirmar el horario, porque ahora todo quedó a la espera del país liderado por Vladimir Putin. En principio, si el avión sale el martes a esa hora estaría regresando el jueves 24 en lugar del miércoles 23.
Este lunes por la tarde se estaban realizando los últimos trámites administrativos con Rusia y explicaron que tuvieron que modificar algunos permisos, lo que hizo que, más temprano, el horario del vuelo se reprogramara.
Los preparativos del vuelo habían comenzado este lunes en el aeropuerto de Ezeiza para que un Airbus 330 de Aerolíneas Argentinas despegara con destino al Aeropuerto Internacional de Moscú-Sheremétievo, un viaje que demora entre 17 y 18 horas.
El avión que traerá las primeras 300.000 dosis de la vacuna rusa contra el coronavirus no llevará pasajeros, pero no irá vacío: viajará una tripulación de 20 personas, de las cuales 10 son pilotos aéreos, lo que responde a la reglamentación internacional, que exige un recambio en la conducción de la nave cada 12 horas.
Entre la ida, la carga de las cajas con vacunas y el regreso a la Argentina, el operativo completo oscilará entre 35 y 40 horas.
Tras el aterrizaje en Buenos Aires, al tiempo que se descargan los bultos se hará la verificación en la Aduana de que los paquetes concuerdan con lo declarado por la Anmat, garantizando la cadena de frío y las condiciones de bioseguridad.
Esta vacuna es la única que tiene negociaciones firmes con la Argentina luego de que el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, reconociera que las conversaciones con la farmacéutica Pfizer para obtener su vacuna contra el Covid-19 se complicaron porque la empresa pidió “condiciones inaceptables”.
