La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad del sistema nervioso que afecta al cerebro y la médula espinal. Lesiona la vaina de mielina, el material que rodea y protege las células nerviosas. La lesión hace más lentos o bloquea los mensajes entre el cerebro y el cuerpo, conduciendo a los síntomas de la esclerosis múltiple.
A lo largo de la pandemia las recomendaciones que hemos estado haciendo a nuestros pacientes con esclerosis múltiple fueron cambiando porque en realidad fuimos adquiriendo nuevos conocimientos, sin embargo, hoy por hoy consideramos que un paciente por el solo hecho de tener esclerosis múltiple, debe tener exactamente los mismos cuidados que la población general para evitar el contagio.
En estudios recientes se demostró que una persona por el solo hecho de tener EM, no tiene mayor riesgo de contraer Covid y en cuanto al pronóstico y a la evolución de aquellos pacientes que se infectaron, lo que se encontró es que las personas que tienen mayor riesgo de tener peores evoluciones son aquellas de mayor edad, las que tengan una discapacidad más pronunciada y/o enfermedades concomitantes, como por ejemplo enfermedades del corazón, pulmonares o diabetes.
Desde el comienzo de la pandemia se notó un descenso de consultas y menos controles por parte de los pacientes, muchos de ellos por dificultades del acceso al sistema de salud, sobre todo controles de laboratorio, controles de estudios de neuroimagen y algunos en cuanto acceso a los consultorios o centros asistenciales, eso fue un tema de mayor preocupación ya que los pacientes con EM tienen que continuar con sus controles. Por otro lado, no se observa un incremento en las internaciones de los pacientes con Esclerosis Múltiple.
*Jefe del Servicio de Neurología Clínica del Hospital Central de Mendoza y presidente de la Sociedad Neurológica Argentina.