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Se lleva muchos secretos: Patricio Farcuh, último dueño formal de la empresa privada de correo OCA, murió este sábado por un paro cardíaco a los 43 años.
Farcuh era contador público recibido de la Universidad de Buenos Aires. Había fundado a los 33 años el Grupo RHUO (Recursos Humanos Organizados) y y RHUO Executive Education (EE), a través de los cuales organizó congresos, convenciones y sesiones privadas exclusivas entre empresas e importantes oradores internacionales.
En 2013 se hizo cargo de OCA, el mayor correo privado del país, apalancado por la familia Moyano. Pero tres años más tarde, Farcuh, considerado testaferro del líder del gremio de Camioneros, denunció que Hugo Moyano había tomado el control de la empresa por la fuerza.
En ese entonces se conoció un video interno en el que se ve cómo Moyano y un grupo de dirigentes gremiales echan a Farcuh de su oficina y luego le niegan el ingreso.
El día que Hugo Moyano echó a Patricio Farcuh de OCA y tomó el control de la empresa por un tiempo.
Eventualmente, la Justicia ordenó su reincorporación como dueño y así se mantuvo hasta febrero de 2019, dos meses antes que el juez Pablo Tejada decretara la quiebra de OCA por una deuda de 7.000 millones de pesos, de los cuales la mayor parte son deudas impositivas con la AFIP. Ese pasivo ahora supera los 8.600 millones.
Por esta medida, Farcuh dejó de ser el dueño de la firma postal, y la Justicia lo inhabilitó y le prohibió salir del país.
En mayo de 2018, Farcuh fue procesado por el delito de retención indebida de aportes de la seguridad social, con un embargo de 400 millones de pesos. Meses después, la AFIP lo denunció por vaciamiento y malversación de fondos de su compañía.
En la denuncia se advertía que Farcuh había contratado “diversos proveedores apócrifos y no vinculados” al giro comercial de OCA. Se constató la adquisición millonaria de bienes y servicios suntuarios para el propio titular de la firma, como la compra de motos de alta gama, relojes costosos, servicios de vuelos aéreos para personas del ambiente artístico y político, además de servicios y bienes del exterior.
También se verificaron contrataciones de empresas vinculadas al propio Farcuh y a su hermano, por “montos ubicados por encima del valor del mercado”.
