El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, dijo abiertamente no estar de acuerdo con la decisión oficial de derogar los cambios en la Ley de Migraciones que había establecido el Gobierno de Mauricio Macri en 2017, cuando se agilizó el trámite para expulsar a inmigrantes que delinquen.
“Fui de los primeros que propuso que los que delincuentes extranjeros en Argentina fueran expulsados rápidamente, que se acortaran los tiempos procesales y que no se permitiera el acceso tan alegremente de aquellos extranjeros que tienen antecedentes penales que tienen que ver con robos o privación de la libertad”, comenzó argumentando Berni en diálogo telefónico con el programa de TV Intratables.
Aclaró además que nadie se comunicó con él desde el Gabinete nacional y que se enteró de la derogación a través de los diarios. Y sumó: “Es una decisión con la que no estoy de acuerdo”.
Aunque siempre se mostró crítico a la gestión de Mauricio Macri y de Patricia Bullrich al frente del Ministerio de Seguridad, y consideró que ese período “fueron cuatro años de bombas de humo”, en este caso, reconoció: “Si hubo algo que realmente funcionó fue la expulsión rápida de los extranjeros que delinquían”.
Los cambios a la política migratoria se habían establecido en 2017, cuando Macri firmó el decreto 70/2017 que creó un “procedimiento migratorio especial sumarísimo” con el objetivo de negar el ingreso y expulsar delincuentes extranjeros con mayor agilidad.
En aquel momento, la gestión macrista había argumentado que la medida se amparaba en que cada Estado tiene “la prerrogativa soberana de decidir los criterios de admisión y expulsión de los no nacionales” y respondía a “la duración de los procesos administrativos y judiciales” así como el aumento de extranjeros en las cárceles argentinas.
Ahora, a través del decreto 138/2021, el Gobierno eliminó el endurecimiento de los controles fijados por el macrismo debido a que, según los argumentos, los cambios en la Ley de Migraciones “resultan irreconciliables” con la Constitución Nacional y con el sistema internacional de protección de los derechos humanos, “entre los que cabe mencionar la violación al principio del debido proceso, al derecho a contar con asistencia y defensa legal, la restricción a un control amplio y suficiente del poder judicial sobre los actos de la autoridad administrativa, la amplitud con la que se prevé la retención preventiva del y de la migrante sin definir las causas que la habilitan y la restricción a los derechos de reunificación familiar y dispensa por razones humanitarias”.
Berni continuó con sus críticas al gobierno en diálogo con Radio Mitre el sábado por la mañana donde advirtió: “No es una discusión de racismo, no me corran con ese discurso. No comparto ni celebro a los que dicen que estamos devolviendo derechos. Argentina tiene universalidad de derechos que alcanzan a los mismos extranjeros que pueden estudiar, acceso gratuito a la salud, muchos gozan de la asignación universal por hijo”.
Berni sobre la derogación del gobierno: “Es una decisión con la que no estoy de acuerdo”. Foto: MARCELO CARROLL.
E insistió: “Tenemos que discutir qué tipo de personas queremos que se radican en Argentina, si es gente de bien o no. Esos grupos que se arrogan la alegría de ampliar derechos a los extranjeros que tienen delitos menores, cuando les toca un hecho de inseguridad en Argentina son los primeros en poner el grito en el cielo”.
El funcionario bonaerense se despegó de aquellos que impulsaron la derogación y dijo no ser parte: “A veces priman las voces de algunos grupos que se arrogan la representación de un colectivo que no es lo que los argentinos estamos discutiendo”.
Aseguró además ser peronista y que “en la unidad básica Perón enseñó que hay una sola clase hombre: el que trabaja”.
“No es estar o no de acuerdo, es decir qué modelo de país queremos”, aseveró Berni quien reconoció a su vez que esto que hace que “todos los días sea más difícil generarle mejor y mayor seguridad a los bonaerenses”.
En esa línea, analizó: “Nos han dejado un país como un barco lleno de agujeros y estamos tapando los parches y sacando el agua. Por otro lado alguien hace olas y no le importa que le siga entrando agua al barco, es muy difícil”.
Berni consideró que la medida del gobierno nacional es comparable con lo ocurrido durante el comienzo de la pandemia con la liberación de presos de algunas cárceles por el riesgo de un contagio masivo de coronavirus: “Esta es la misma discusión de cuando abrieron las puertas de los penales, los que estaban ahí delinquieron y son artífices de su propio destino”.
LGP
Fuente Clarin