José Mayans acusó a la oposición de estar “buscando un muerto” en Formosa

Un día después de la jornada sin precedentes en Formosa contra el gobierno de Gildo Insfrán, el presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara Alta, José Mayans, acusó a la oposición de Juntos por el Cambio de estar “buscando un muerto” en esa provincia.

Las palabras del senador formoseño se enmarcan asimismo en el cuarto día de manifestaciones en la tierra gobernada hace 25 años por Insfrán, quien a su vez participó este lunes de un acto encabezado en la Casa Rosada por el presidente Alberto Fernández. 

“Lo primero que le dijo (Mauricio) Macri a Gildo cuando vino como presidente fue ‘la próxima elección te voy a ganar’. Estos grupos que acompañaron a Macri y el desastre que hicieron nunca aceptaron la voluntad popular. ¿Ustedes ven lo que le hicieron al gobierno nacional, lo que hicieron con la causa del dólar futuro? Vergonzoso. Lo que hicieron con la causa AMIA…”, encadenó con su habitual enardecer Mayans en diálogo con El Destape Radio.

Siguió: “Ahora están haciendo actos políticos. Las agrupaciones nuestras no van a seguir el juego de ellos ni aceptar las provocaciones. Lo que están buscando es tener un muerto. Están provocando de todas maneras”.

​Mayans, en ese sentido, le apuntó directamente a Patricia Bullrich, presidenta del PRO, quien el domingo viajó a Formosa y participó de la marcha junto con el senador Luis Naidenoff. La comitiva de la exministra de Seguridad de Cambiemos también la integraron los diputados Waldo Wolff y Ricardo Buryaile.

“Vino Patricia Bullrich y algunos diputados nacionales que están en plena campaña. Hay grupos de la Capital Federal que son mediáticos, tienen una fuerte presión y están distorsionando los temas diciendo que el 60% de Formosa vive de la administración pública, cuando Formosa es una provincia que no tiene deuda, no tiene déficit y tiene 46 mil empleados públicos de los 700 mil habitantes, o sea que es el 8% de la población”, argumentó Mayans, sin filtros ni repreguntas.

En referencia a la represión policial del viernes en Formosa -que generó esta oleada de protesta-, el senador del Frente de Todos dijo que hubo un grupo importante de formoseños que se manifestó “pacíficamente y no hay ningún problema”. 

“Pero hay otro grupo -siguió- que fue a atropellar el vallado de la Casa de Gobierno, se encontraron con la policía, quisieron entrar donde estaban los autos con bombas molotov. Hubo más policías heridos que manifestantes. Hay como 20 policías heridos, uno está internado en terapia intensiva. Fue una especie de intifada porque llevaron piedras. Pero son grupos minoritarios. Lo que planean es la provocación y cómo hacer el mayor daño posible”. Por la represión policial hubo severas críticas de organismos de derechos humanos. Hubo más de 90 detenidos.

De manera similar, la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic -que repudió la represión- también había entendido el domingo hay “un ensañamiento con el gobierno de Gildo Insfrán que es inadmisible” y una “provocación sistemática”.

Opinó Mayans: “Si piden la intervención de Formosa que no tiene deuda ¿Qué tienen que hacer con Jujuy o Mendoza que viven del estado nacional, que son provincias quebradas? Que no cumplen con los requisitos institucionales. Formosa está impecable desde el manejo la administración del Estado. Obviamente tenemos el ataque salvaje de un medio que dice que acá es la dictadura. La dictadura es una cosa y otra es un gobierno producto de la voluntad popular”.

Concluyó: “Macri nos cortó toda la obra pública por ser de otro partido y ahora a solidarizarse con el pueblo de Formosa. Es un caradura”.​

La serie de protestas comenzó el viernes como un rechazo al regreso a fase 1 de los controles sanitarios y por la resistencia de comerciantes, que se sumó a las denuncias por las violaciones de derechos humanos en los centros de aislamiento en Formosa.

Este lunes, Gildo Insfrán decidió tomar un avión rumbo a Buenos Aires para decir presente en la firma del Acuerdo Federal Argentina Unida contra la Violencia de Género en Casa Rosada, lo que fue interpretado como un gesto de Alberto Fernández hacia el gobernador.

DS

Fuente Clarin