A 18 años del desembarco “pingüino” en Casa Rosada, con la asunción de Néstor Kirchner como presidente, el kirchnerismo gana cada vez más espacio en áreas estratégicas del gobierno de Alberto Fernández. Y lo hace sustentado en buena parte por funcionarios que vienen de la Patagonia, no sólo de Santa Cruz, sino también de provincias vecinas como Neuquén y Río Negro.
Tres de los movimientos que realizó el Ejecutivo en los últimos meses llegaron desde provincias del Sur del país, con diputados que pasaron a cubrir cargos de relieve: Darío Martínez, de Neuquén, Pablo González, de Santa Cruz, y Martín Soria, de YPF.
De Neuquén a conducir una secretaría clave
El primero fue Darío Martínez, quien llegó a la Secretaría de Energía en agosto del año pasado, en reemplazo de Sergio Lanziani. Rionegrino de nacimiento, de la localidad de Ingeniero Huergo, venía de ser presidente de la comisión de Energía de la Cámara baja. A los 46 años, fue designado con la venia de Máximo, su jefe en Diputados, y desde allí viene construyendo una sólida relación con Martín Guzmán, que supervisa el área.
Al punto de que en el debate interno sobre la suba de tarifas de luz y gas, incluso, Martínez terminó jugando cerca del ministro y diferenciándose del Instituto Patria, que prioriza mantener los precios de los servicios congelados.
Martínez edificó toda su carrera política previa desde Neuquén, donde fue concejal de 2005 a 2013, para luego ser electo diputado nacional a partir de 2015 y hasta su paso a Energía.
El secretario de Energía, Darío Martínez, con el presidente Alberto Fernández.
El elegido de Máximo y Cristina en YPF
La llegada de Pablo González a YPF en reemplazo de Guillermo Nielsen representó el arribo del más pingüino de todos los funcionarios asumidos en estos 15 meses de gestión de Alberto Fernández. Principal asesor de Néstor Kirchner en sus años en la gobernación de Santa Cruz, llegó a ser vicegobernador de esa provincia de 2015 a 2019, antes de ser electo también como diputado nacional. Desde enero, el nacido en Río Gallegos hace 52 años, es el jefe de la principal empresa estatal del país.
Antes había realizado su carrera completa dentro del Estado, desde su paso en 1993 como asesor Legal de Servicios Públicos Sociedad del Estado. Luego, en su único antecedente dentro del sector energético, trabajó como director en Distrigas, firma que distribuye gas natural y gas licuado de petróleo en Santa Cruz, donde actualmente su esposa, Karina, es vicepresidenta.
Abogado egresado de la Universidad de La Plata, en Santa Cruz también fue subsecretario de recursos tributarios en el último mandato como gobernador de Kirchner, de 1999 a 2003, y se mantuvo en la provincia durante los ocho años siguientes, con el kirchnerismo ya instalado en la Rosada.
Hasta 2011, en el gobierno de Daniel Peralta, fue ministro de Gobierno y luego jefe de Gabinete provincial, con un breve paso como legislador, tras las elecciones de 2007. De 2011 a 2015, antes de ser vicegobernador, fue senador nacional por el entonces Frente para la Victoria.
Máximo Kirchner, jefe del bloque de diputados K, se abraza con Pablo Gónzalez, titular de YPF.
Un rionegrino dentro del gabinete
Martín Soria, de 45 años, y designado ministro de Justicia, es otro patagónico que ha tenido un salto desde la Cámara de Diputados hasta el gobierno nacional, bajo el ala de Cristina Kirchner.
Primogénito del ex gobernador de Río Negro, Carlos Soria, asesinado por su esposa Susana Freydoz en 2012, Martín viene construyendo una carrera en ascenso desde 2007, cuando asumió como legislador provincial.
Cuatro años después, sucedió a su padre como intendente de General Roca, y ocho años más tarde, en 2019, le dejó el lugar a su hermana, María Emilia, para asumir una banca como diputado nacional, que aún sigue ocupando, hasta que se confirme su asunción como ministro de Justicia.
Su vinculación al sector judicial es previa a todo ello. Tras recibirse de abogado en la UBA, fue parte del juzgado federal del entonces juez Juan José Galeano, y luego relator en la vocalía de la Cámara Federal de General Roca.
Kirchnerizado hasta la médula en los últimos años, se convirtió en un antimacrista duro muy crítico del funcionamiento del Poder Judicial. “Vine a desarmar el lawfare”, fueron sus primeras palabras desde antes de asumir. También habló de su jefa política, Cristina Kirchner, involucrada en múltiples expedientes judiciales. “Quiere que la Justicia la libere de culpa y cargo”, dijo.
Cristina Kirchner y Martín Soria, nuevo ministro de Justicia de la Nación.
Más presencia patagónica
Además de los tres citados, han ganado peso específico en el último tiempo otros funcionarios del Frente de Todos surgidos desde las provincias patagónicas. Por Río Negro, María Emilia Soria, joven diputada de 2013 a 2019 y actual intendenta de General Roca, con 35 años. La hermana del actual ministro de Justicia apoya el modelo, pero por ejemplo ha votado a favor del desafuero de la Cámara de Diputados de Julio De Vido, en 2017.
Senadora nacional por Río Negro del Frente de Todos, Silvina García Larraburu es crítica de los Soria, pero está alineada a Cristina Kirchner a nivel nacional. Barilochense, de 52 años, cambió su visión sobre el aborto legal: en 2018 rechazó la iniciativa, en 2020 la aprobó y otorgó un voto clave.
Martín Doñate, senador nacional, es otro de los aliados del kirchnerismo en la Cámara baja, aunque, en cambio, mantiene una estrecha relación con Soria, a quien felicitó por haber asumido como jefe de Justicia, dándole su apoyo para reformar el sector y “terminar con el lawfare”. Por su parte, Soria será reemplazado como diputado por otro leal: Pedro Dantas, hasta ahora responsable de la ANSeS de Cipoletti y ex intendente de Campo Grande.
Por Neuquén, tras la salida de Martínez a la Secretaría de Energía, quien asumió hasta fines de 2023 como diputado nacional fue Guillermo Carnaghi. Es decididamente un hombre que responde al secretario energético y alineado al Gobierno a nivel provincial. Desde esa provincia surgió un histórico del kirchnerismo, más vigente que nunca: Oscar Parrilli, senador nacional, ex secretario de la Presidencia y principal referencia de Cristina Fernández.
Por Santa Cruz, en Diputados, el reemplazo de González tras su salida a YPF fue Jorge Verón, funcionario de Alicia Kirchner y oriundo de Río Turbio. También en la Cámara Baja sobresale por esa provincia Juan Benedicto Vázquez, quien fue noticia a mediados de febrero por haber sido uno de los vacunados VIP en Santa Cruz, pese a tener 54 años y no pertenecer a personal de riesgo.
Pero una de las funcionarias más leales surgidas desde esa provincia es Virginia García, cuñada de Máximo Kirchner y actual titular de la Dirección General Impositiva. Previamente, fue asesora de Cristina Kirchner y senadora nacional por Santa Cruz de 2015 a 2017.
Fuente Clarin