Luego de que sus empleados no esenciales pasaran casi un año en home office obligatorio, muchas de las grandes empresas comenzaron a hacer planes de retorno imaginando un futuro próximo con modalidades híbridas, en las que el tiempo presencial fuera igual o incluso mayor que el tiempo trabajado a distancia.
Pero con la segunda ola de coronavirus en puertas y la vacunación avanzando a un ritmo menor al esperado, 2021 no parece ser el año de llegada a la “nueva normalidad”. ¿Qué conviene hacer mientras tanto?
En una columna reciente, Paul Krugman observaba que, mientras que las ventajas del trabajo a distancia son evidentes, las de volver al trabajo presencial son relativamente sutiles. Entre ellas, los beneficios de la comunicación cara a cara y la serendipia (descubrimientos casuales) que puede surgir de las interacciones no programadas, enumeraba el nobel de Economía.
También para muchos empleados la vuelta parcial a la oficina implica ventajas comparativas frente a las dificultades de organizar el trabajo en hogares donde todos sus habitantes conviven la mayor parte del tiempo.
Según el estudio “Workmonitor” de Randstad, que se realiza en 34 países e incluye una muestra de 800 casos en la Argentina, el 47% de los trabajadores en nuestro país optaría por un esquema híbrido como formato permanente cuando pasen los efectos de la pandemia (12 puntos por encima de la media global). Sólo el 19% preferiría seguir trabajando siempre desde su hogar, y apenas el 6% quisiera trabajar siempre desde la oficina.
Además, un 17% elegiría una opción que le diera flexibilidad para cambiar con libertad sus horarios, el 6% se inclina por un formato que le permita elegir cuándo trabajar desde el hogar y un 5% optaría por trabajar de forma remota desde cualquier lugar.
Por la vuelta
En 2020, la vacancia de espacios de oficina en la Argentina se ubicó en 12,2%, “el nivel más alto de la década”, informa Matías Celasco Correa, Research Manager de CBRE, empresa de servicios de real state comercial. “Se pasó de una vacancia de 7,7% a 12,2% en un año, eso significa alrededor de 110 mil metros liberados”, agrega.
Sin embargo, a nivel global, algunas empresas como Microsoft anunciaron la vuelta gradual a la oficina. “Muchas big tech están pesando en volver con toda la fuerza de trabajo pasada esta situación, porque la oficina forma parte de la estrategia de competencia por el talento“, analiza Ana González Ferrero, directora de Project Management de CBRE. “Son oficinas que tienen todo para que el colaborador quiera ir”, agrega.
La situación local es más de “esperar y ver qué pasa”, dice Gonzáles Ferrero. A la situación sanitaria se suma la inminente entrada en vigencia de la Ley de Teletrabajo. “Muchas empresas no toman decisiones porque no terminan de entender cómo les va a afectar esta ley”, asegura.
A pesar de las ventajas del home office, las empresas valoran mucho la cultura que se genera en las instancias presenciales.
En Accenture ya tenían un esquema de home office dos días por semana previo a la pandemia. “Cuando tuvimos que ir todos a trabajar a casa estábamos acostumbrados a la modalidad, por lo que desde le punto de vista de la productividad no hubo gran distorsión”, cuenta Federico Welsh, director de RR.HH.
Pero hacer home office total en cuarentena no es igual que hacer home office en la normalidad: “generó una sobrecarga emocional en toda nuestra gente”, dice. El plan es volver a la modalidad anterior, un sistema mixto “porque valoramos muchísimo la cultura que se genera presencialmente en la oficina”, señala Welsh.
El esquema de vuelta gradual “está armado” pero “no se está ejecutando porque todavía seguimos con el peligro de contagio”, aclara Welsh. “Mediremos la intensidad del retorno a la oficina de acuerdo a qué tan segura sea la situación sanitaria”, agrega. Hoy, menos del 5% de la planta trabaja de manera presencial, por cuestiones puntuales.
En los bancos, el personal de atención en sucursales forma parte del trabajo esencial. ¿Qué pasará con el resto? “Estamos en una etapa previa a la que llamamos ‘nuevo normal’, en la que vamos a volver con una modalidad híbrida“, cuenta Rodolfo Zimmermann, gerente de Diseño e Innovación del área Personas del Banco Galicia.
En las consultas mensuales a los empleados, surgió cierto hartazgo del trabajo desde casa y “habilitamos la posibilidad de volver al estar más controlado el tema de los contagios, con un sistema de reservas de espacios“, dice Zimmermann. “Unas 80 personas lo están aprovechando”, informa. A futuro, cuando mejoren los indicadores sanitarios, se promoverá un máximo de 3 veces por semana en la oficina.
El Banco Santander se encuentra en “fase 3”, con regresos voluntarios a los espacios compartidos. Foto: Gentileza Santander.
En el Banco Santander se encuentran en lo que llaman “fase 3”: “Al volver la escuela y comenzar la vacunación, se comenzó a volver a las oficinas en determinados porcentajes, teniendo en cuenta riesgos y situaciones particulares”, señala Lorena Carrera, líder de Cultura el área de gestión de Personas.
En esta fase el regreso es voluntario “sin superar el 40%”. El después “sería una nueva normalidad que va a incluir el trabajo remoto para los equipos que puedan desarrollarse de esa manera”, agrega Carrera.
Retornos voluntarios
En KPMG trabajan 1.300 personas “todos haciendo home office desde el inicio de la cuarentena”, indica su CEO, Néstor García. “Si un proyecto en un cliente requiere trabajo presencial, debe ser bajo estrictos protocolos“, dice. Pero aclara que “como vimos en los últimos 12 meses, podríamos continuar en home office sin afectar el cumplimiento de nuestros servicios y la administración de nuestra sociedad”.
La modalidad remota continuará “de seguir con las mismas condiciones sanitarias. Solo están abiertas las oficinas para ser utilizadas en caso puntuales y a requerimiento”, cuenta García. “Según nuestros protocolos no podrían concurrir más de 10 empleados por piso y solo para los que quieran ir, no hay obligación“.
Según una encuesta interna, el 86% de los empleados optaría por un mix de trabajo a distancia y trabajo presencial, “pero con más del 50% de los días en home office. Así que hay una preferencia clara hacia un mix orientado al home office”, señala el CEO.
García entiende que, en cuanto al trabajo remoto, existen ventajas relacionadas con “un gran ahorro de tiempo y costos por viajes, más tiempo compartido con la familia y contratar gente de cualquier ciudad del país”. Pero, como desventaja “está la pérdida de la interacción personal con grupos de trabajo”, por lo que mantener la cultura de la compañía “es un desafío”.
El mix entre trabajo presencial y trabajo remoto es a lo que apuntan la mayor parte de las empresas. Foto: AFP.
También en Telecom están desarrollando un mix presencial y remoto. Para eso “los esfuerzos están concentrados en la remodelación y adecuación a la nueva cultura interna de tres inmuebles, dos en CABA, en las zonas norte y sur, y otro en GBA Norte”, comenta Sergio Faraudo, director de Capital Humano.
Los nuevos entornos laborales incluirán oficinas con pantallas para reuniones virtuales, y el uso de herramientas informáticas colaborativas. “La idea es potenciar los puestos de trabajo y que se conviertan en espacios de encuentro, intercambio y co-working“, enfatiza el ejecutivo.
El esquema planificado “será un mix de opciones: aquellos que por su función deban hacer presencialidad full, aquellos que puedan combinar remoto y presencial y quienes desarrollen su tarea en forma remota completamente. Una vez superado el contexto sanitario, se irá implementando la modalidad de trabajo para cada función”, detalla Faraudo.
Por el momento, salvo en las tareas técnicas que no permiten la modalidad de home office, el 70% de los empleados se encuentran todavía trabajando a distancia.
Donde ya están regresando a la presencialidad es en L’Oreál. Por un lado, de los 600 empleados de la empresa en la Argentina, 105 trabajan en el centro de distribución ubicado en Norlog con estrictos protocolos, “ya que las tareas no se pueden realizar de forma remota”, informa Verónica Vatausky, directora de RR.HH..
En las oficinas, para reducir al mínimo la cantidad de personas y poder respetar el distanciamiento, “convocamos a 230 colaboradores a quienes les dimos la posibilidad de volver al modo presencial. Aquellos que quisieron, actualmente se dividen en dos grupos del 50% cada semana, de modo que cada burbuja realiza trabajo presencial durante 2 semanas al mes, intercaladas”, explica Vatausky.
Quedaron eximidos “los colaboradores que se encuentran en grupos de riesgo, personas con hijos en edad escolar y pasantes”, aclara. En cuanto al plantel de vendedores “analizamos los riesgos según cada plaza y en estos casos, priorizamos que las reuniones con los clientes sean a través de video conferencias”.
Este regreso “fue de manera paulatina, opcional y en burbujas y se tuvieron en cuenta distintas variables: para aquellos que no tenían movilidad propia, la compañía se hizo cargo del costo del transporte y para aquellos que sí cuentan con movilidad, se les brinda un espacio de cochera”, dice Vatausky.
“Todavía no tenemos una fecha concreta ‘de regreso'”, dice, por su parte, Clara Franco, gerente de RR.HH. de Pepsico Argentina. Allí trabajan 1.500 empleados, de los cuales 400 se desempeñan en tareas administrativas y están realizando home office.
“Para nosotros es muy importante considerar varios factores, entre ellos, que se estabilicen ciertos indicadores sanitarios a nivel país. Para cuando estemos listos, tenemos planificado un esquema de regreso progresivo, volviendo en un esquema piloto que nos permita testear el funcionamiento de los protocolos”, amplía la ejecutiva.
Según Franco, “en general, las personas prefieren tener la flexibilidad de trabajar de 2 a 3 veces por semana en la oficina, y la principal razón para volver es reencontrarse con sus compañeros“.
En la farmacéutica Sanofi, los empleados que necesiten pueden ir a la oficina, pero deben registrarse previamente. Foto: Gentileza Sanofi.
En la farmacéutica Sanofi, que tiene 700 empleados en la Argentina, cuando arrancó el ASPO se dispusieron “grupos especiales para mantener activa la Planta de Producción Industrial de Vacunas y el Laboratorio de Calidad para asegurar el suministro de medicamentos”, cuenta Justo Nazar, director de Recursos Humanos para Sanofi Cono Sur.
“Actualmente, la gran mayoría de los colaboradores continúa con la modalidad de home office. El equipo de Campo está en modalidad mixta y sólo los equipos de la Planta Industrial y el Laboratorio de Calidad (alrededor del 20%) se mantienen en trabajo presencial”, detalla.
Sin embargo, las oficinas están parcialmente abiertas “para quienes deseen un ‘retorno voluntario’“, cuenta Nazar. “Los colaboradores que no pudieran trabajar desde sus casas, que requieren infraestructura o tengan reuniones de equipo (con los protocolos requeridos) pueden asistir a las oficinas. Previamente, deben registrarse y elegir una franja horaria entre lunes, martes, jueves y viernes, ya que los miércoles las oficinas permanecen cerradas para desinfección”.
Según Nazar, los colaboradores “agradecieron mucho” la posibilidad de trabajo remoto pero en muchos casos “se extraña la interacción presencial y creemos que es importante mantener las oficinas como un espacio de socialización, colaboración e innovación. Entendemos que un modelo mixto o híbrido es el que presenta mayor aceptación”.
Unilever preparó un modelo de trabajo híbrido que todavía no están implementando. “Contamos con un protocolo a nivel global para el regreso a las oficinas administrativas que contempla una serie de indicadores asociados a la situación epidemiológica de cada país. Hasta tanto esos indicadores no estén en los niveles que exige Unilever, no comenzaremos con el modelo de trabajo híbrido”, dice Melina Cao, directora de RR.HH. de Unilever Argentina.
Mientras tanto, están reacondicionando los espacios de trabajo. “Si bien hace más de 10 años que los empleados administrativos tienen la posibilidad de trabajar fuera de la oficina algunos días a la semana, este nuevo modelo lleva el formato un paso más allá ya que implica una transformación más profunda. La oficina deja de ser ‘el lugar de trabajo’ para ser un espacio de colaboración, conexión e innovación. El trabajo desde casa estará orientado a tareas más individuales o de concentración y cada empleado podrá decidir la cantidad de veces que asistirá a la oficina“, detalla Cao.
Fuente Clarin