El Gobierno intentará que el segundo trimestre que acaba de empezar marque el punto de inflexión con relación a la inflación y así arranque de una vez la desaceleración que les dé aire para llegar a las elecciones de octubre.
En una semana se conocerá la inflación de marzo, que los analistas privados estiman nuevamente en la zona del 4%. Con esto el primer trimestre acumula un alza superior al 13% y consume un tercio de la pauta de inflación de 29% fijada por el Gobierno para todo el año.
El ministro Matías Kulfas insiste en que esos números empezarán a bajar este trimestre. Para esto el Gobierno está terminando de definir nuevas medidas que se cocinarán esta semana entre Kulfas y la secretaria de Comercio Interior, Paula Español.
El Gobierno viene trabajando tres ejes: el dólar, la ampliación de Precios Cuidados y un paquete con beneficios para las pymes que permita extender la oferta de alimentos en las góndolas.
De las tres medidas la del freno al dólar ya se siente. En marzo, el tipo de cambio oficial aumentó 2,4%, muy por detrás de la inflación esperada. La consultora C&T estima el índice del mes pasado en 4,2%, por encima del 3,6% que se había registrado en febrero y del 4% de enero.
Este lunes, en el primer día hábil del mes, el dólar se movió poco: subió 24 centavos y cerró a $ 92,24, en un mercado con buena oferta por la liquidación del agro que le permitió al Banco Central comprar US$ 65 millones.
Con esto se cumple el objetivo del ministro de Martín Guzmán de que el dólar corra por detrás de la inflación y contribuya a quitarle envión a los precios. La meta es una devaluación anual del 25%.
La intención del Gobierno es que ese gap entre el porcentaje de suba mensual del dólar y el de la inflación se vaya cerrando para que el índice no escale mucho más allá del 2% al mes. Esto implica bajar a la mitad la aceleración que hoy traen los precios.
Dentro de los componentes de la inflación, el rubro alimentos y bebidas es el que más preocupa. Según C&T la suba de este segmento habría sido del 6% el mes pasado, por lo que prácticamente duplica el alza del índice general.
Para encauzar a los alimentos, el Gobierno apelará a una receta conocida: más controles de precios. La semana pasada ya dio un paso en ese camino al renovar una vez más Precios Máximos, pese a las críticas del sector empresario que asegura que con esta política no cubre los costos.
Esta semana se terminará de pulir la lista de Precios Cuidados, un acuerdo voluntario -a diferencia de Precios Máximos que es compulsivo- que se vence el lunes 12 de abril. El plan oficial es ampliar ese listado, que empezó el año pasado con 400 productos y ya supera los 660 y hacerlo crecer en torno a 20%. Serían 130 productos más dentro de esta lista.
Sin embargo, los comerciantes objetan que esta política de controles termina generando faltantes en las góndolas, que se reemplazan con otros productos, muchas veces de la misma marca, con pequeños cambios en los empaques y con precios más altos.
Para engrosar Precios Cuidados el Gobierno necesita del aval de los privados, al igual que para convencer a las grandes cadenas de supermercados de que lancen canastas promocionales con precios bajos.
Pero los funcionarios admiten que la relación con el sector privado se tensó en las últimas semanas. A tal punto que la COPAL, la cámara que agrupa a los productores de alimentos, presentó un recurso administrativo para pedir que se suspenda el SIPRE, el sistema que los obliga a detallar los precios y los stocks que manejan.
Para los empresarios el SIPRE atenta contra la “viabilidad y competitividad de la industria“, según detalló COPAL. Y analizan ir a la justicia por este tema.
Ayuda a las pymes
Para los funcionarios una de las claves para bajar la inflación es aumentar y diversificar la oferta. Por eso pondrán en marcha una serie de medidas para estimular a las pymes a ampliar la producción.
En las últimas horas se dio un primer paso con el lanzamiento del Programa de Apoyo a la Competitividad (PAC) que destinará subsidios de hasta $ 1,5 millones para 7000 pymes que presenten proyectos para aumentar la productividad.
Además, la cartera de Kulfas lanzará otro programa “para fortalecer la producción de alimentos en pymes, en cooperativas, en microemprendimientos y poder capacitarlas para que estén en las góndolas”, detallaron.
Para esto se apoyarán en la ley de Góndolas, que según afirmó Kulfas “va a desconcentrar el mercado alimenticio” al darle más visibilidad a estos productos.
AQ
Fuente Clarin