A la espera del decreto de necesidad y urgencia que firmará Alberto Fernández para imponer un confinamiento total en las zonas consideradas en alarma epidemiológica en todo el país, el Gobierno acordó con la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires cómo serán los controles a partir de esta medianoche, cuando comenzará a regir la medida que se prolongará hasta el 30 de mayo.
A diferencia de otras ocasiones, donde hubo cruces y mucha tensión, en la reunión tripartita de este viernes en Casa Rosada hubo buena sintonía. Coincidieron en la importancia de realizar “controles estrictos” para garantizar que la medida tenga un impacto en la baja de la curva de contagios, que se volvió a disparar en los últimos días.
La reunión, en el Salón Norte, fue encabezada por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, su par bonaerense, Carlos Bianco, y el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli.
Coordinaron a los responsables de Seguridad, Sabina Frederic (Nación), Sergio Berni (Provincia) y Marcelo D’Alessandro (Ciudad), y a los del Transporte, Alexis Guerrera (Nación), Alejo Supply (Provincia) y Juan José Méndez (Ciudad).
Interlocutores de la cumbre aseguraron a Clarín que hubo “un muy buen clima”, más allá de “alguna chanza” entre Cafiero y Santilli y del clima siempre tenso entre Frederic y Berni. “Hubo mucha conciencia de todos en que este cierre es necesario”, confiaron.
La decisión, en el Área Metropolitana de Buenos Aires, es que se cerrarán 71 accesos a la ciudad, pero también se controlarán especialmente las rutas bonaerenses porque “el turismo está prohibido”, remarcaron. Así, habrá fuerte presencia de Seguridad en el peaje de Hudson para evitar viajes no permitidos. “Sólo se podrán trasladar los esenciales”, insisten. Y aclaran que el transporte de larga distancia estará habilitado sólo para quienes demuestren esa condición.
Respecto a los permisos, sólo los esenciales no deberán volverse a empadronar. El resto, incluso especiales y autorizados, siempre que sus categorías queden habilitadas, tienen que volver a tramitarlos.
Hubo, luego, un contrapunto a partir de un tema que había quedado sin definición a partir que este jueves el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dijera que los comercios no esenciales iban a poder atender puertas afuera, cuando un rato antes el Presidente había dicho que sólo iban a poder funcionar las actividades no esenciales.
Tras la reunión, Nación anunció que los no esenciales van a funcionar vía delivery o take away. “No está permitida la venta en la puerta de los comercios no esenciales. Y empleados o dueños de comercios de Ciudad que vivan en Provincia no tendrán habilitación para ingresar a Ciudad, se caen sus permisos”, indicaron.
Desde Ciudad, en tanto, convalidaron: “El comercio no esencial funcionará puerta hacia afuera con delivery o para llevar, con compra previa de forma electrónica o por teléfono”.
“Quienes trabajan en sector no esencial no van a poder cruzar de Provincia a Ciudad. Van a caer los permisos de los no esenciales y va a haber un control firme de los códigos QR”, anunció Frederic, que defendió los operativos que hicieron las fuerzas federales, al remarcar que desde el 9 de abril tenemos 5 mil causas penales y más de 100 vehículos secuestrados”.
Por su parte, el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, recordó que “el transporte se mantiene habilitado para esenciales”, pero dejó la puerta abierta para que en el DNU, Fernández incluya otros rubros.
“Se están revisando las actividades autorizadas para reducirlas al mínimo posible, de modo tal que estén autorizados sean menos que los que están actualmente”, contó.
Fuente Clarin