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En una manifestación más de las crecientes tensiones internas en el oficialismo, el mundo diplomático y en el mismo Gobierno se preguntan qué está pasando con las designaciones de Marcela Losardo y Guillermo Nielsen como embajadores.
La ex ministra de Justicia y quizás la más amiga de Alberto Fernández en el Gabinete, de cercanía casi familiar, había sido apuntada en marzo pasado para el cargo de representante argentina ante la UNESCO, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, para la Ciencia y la Cultura.
Fue luego de un largo desgaste al fue sometida por el kirchnerismo, encabezado por la vicepresidenta Cristina Kirchner al no ver plasmada la reforma judicial por la que sigue batallado para acomodar las causas por corrupción que la aquejan a ella y a sus hijos.
En tanto, Nielsen, también hombre apuntado por Fernández, se vio forzado a salir de la presidencia de YPF, en otra derrota del Presidente en su relación con La Cámpora.
Figura respetada en diversos ámbitos por su actuación como ex secretario Finanzas, Nielsen aceptó salir de la petrolera para ir de embajador a Arabia Saudita.
La situación es esta, según pudo saber Clarín. El pliego de Losardo está en el Senado desde el 20 de marzo y tomó estado parlamentario, recién un mes después. El de Nielsen está desde antes. Desde marzo.
Como ambos son embajadores políticos, su pliego debe ser aprobado en la Comisión de Acuerdos, que preside la ultra cristinista Anabel Fernández Sagasti, y luego debe ser ratificado por el pleno. La situación despierta dos interpretaciones. Una indica que la demora es por la situación sanitaria argentina, en un caso parecido a las demoras de la primera etapa de la cuarentena de 2020 cuando se atrasaron varios embajadores políticos designados por Fernández para sedes diplomáticas. Y la otra, abiertamente es que “La Doctora” -dicen en clara referencia a Cristina- los tiene o “cajoneados” o demorados “un poco” con algún guiño.
“La doctora les está haciendo sentir su poder”, resumió un observador en el Senado. El frío tratamiento de los candidatos a embajadores propuestos por el presidente Alberto Fernández contrastó con recientes nominaciones impulsadas por CFK desde el Instituto Patria. Son los casos de los ahora embajadores Sabino Vaca Navaja, a China; Luis Ilarrigue, a Cuba; y Ariel Basteiro, a Bolivia. Los tres fueron tramitados expeditivamente por la comisión correspondiente y fueron girados al pleno de la Cámara Alta en tiempo y forma.
La designación de Losardo como reemplazante del fallecido Fernando “Pino” Solanas provocó malestar en los círculos culturales por los escasos antecedentes en esta materia de la ex ministra.
Durante años, la representación ante la UNESCO, con sede en París, fue cubierta por figuras vinculadas al mundo de la Literatura como Abel Posse, Archibaldo Lanús, Víctor Massuh y Jorge Asís.Al mismo tiempo, en Cancillería aseguran que Losardo está ya dedicada a su trabajo en Buenos Aires, aún sin ratificación parlamentaria.
A su vez, el nombramiento de Nielsen en Arabia Saudita pareció responder a la necesidad de Alberto Fernández de encontrar un “premio consuelo” para quien también fue embajador en Alemania y que incluso en su momento fue mencionado como posible ministro de Economía. Pero Nielsen no es objeto del afecto de CFK ni de La Cámpora.
Fuente Clarin
