De fiesta: Italia celebra los mejores días en un año y medio de pandemia

Italia vive las mejores jornadas de sus 15 meses de pandemia, que han costado mas de 126 mil muertos. Infectados y fallecidos por el coronavirus bajaron el 60% en tres semanas. El domingo hubo 2969 contagiados y 44 muertos una cifra que no se veía desde hace siete meses.

Las salas de terapia intensiva reservadas en los hospitales están semivacías. De las salas comunes se fueron a su casa otros 392 internados y algunos locales Covid 19 han sido cerrados en medio de aplausos.

Se anunció que con los records de vacunación que superan el medio millón de dosis diarias, el 20% de los italianos está inmunizada y que fueron inoculadas casi 35 millones de dosis. El 38% ha recibido al menos una dosis.

A estos datos exultantes se suma el anuncio de que en junio llegarán 20 millones de vacunas más y se considera “realista” que hacia fines del verano se llegará a la meta de 42 millones de inmunizados, que según los cálculos matemáticos tendrán su día: el 5 de setiembre. En ese momento se lograría la protección de los 18 millones de italianos restantes.

El país vuelve a sonreír

Es el momento del gran alivio y el país vuelve a sonreír. Siete de cada diez italianos harán sus vacaciones en patria y más de la mitad está seguro que “lo peor ha pasado”.

Pero es mejor no cantar victoria. En la cercana Gran Bretaña que alcanzó niveles de primado en las vacunaciones, han crecido de golpe los contagiados.

El primer ministro Boris Johnson avisó que la culpa la tiene la difusión de la variante india del coronavirus, que en el gigante asiático de 1400 millones de habitantes ha causado tremendos estragos.

Johnson dijo que si es necesario volverán a aplicar restricciones. Los científicos sostienen que la variante es peligrosa por lo contagioso pero que no es más letal que la variante inglesa dominante.

Sin embargo la versión india podría destronar a la local en las próximas semanas en el Reino Unido.

En Italia la variante india ha contagiado al 1% de los infectaos y se teme una rápida difusión.

Italia anunció que hasta el 21 de junio ha sido prorrogada la prohibición ya existente de ingreso al país de viajeros procedentes de la India, Bangladesh y Sri Lanka, donde la variante india está en auge.

Los científicos aclaran que la circulación del virus no está todavía del todo bajo control, pero la disminución de los contagios a menos de 50 cada 100 mil personas permite detectar nuevamente y trazar a los virus que producen los contagios.

“Nos pone en condiciones de volver a controlar la pandemia, lo que era imposible con tantos contagiados”, dijo el científico Silvio Brusaferro.

La difusión de buenas noticias han elevado al Panteón nacional al primer ministro Mario Draghi, el prestigioso economista que llegó hace tres meses al poder sustentado por una vasta coalición de partidos de centroderecha y centroizquierda.

Draghi puso a un general del Ejército, Francesco Figliuolo a organizar la campaña de vacunación que está dando grandes frutos.

Su popularidad personal ha llegado al 66%, por encima del 62% del gobierno, muy lejos de los políticos. Draghi tiene otra prioridad en la que se juega su prestigio.

Poner en marcha el Plan de Recuperación económica que cuenta con un fantástico fondo de 235.000 millones de dólares, de los cuales 80 mil son subsidios gratuitos de la Unión Europea, que le dio además otros 110 mil millones en prestamos a devolver a larguísimos plazos y muy baja tasa de interés.

El gran problema es armar los planes, recibir tanto dinero y demostrar que se está gastando adecuadamente para reactivar pero también reformar la economía en los próximos cinco años.

Italia ha tenido siempre problemas con su incapacidad de gastar bien el dinero para realizar los programas y las obras públicas financiadas por la UE gracias a su terrible burocracia y a una difusa corrupción mezclada con la injerencia de las mafias.

Mario Draghi ha nombrado ministros y comisarios a cargo de las áreas de elevado nivel técnico para realizar los planes de desarrollo poniendo en los puestos claves a técnicos, especialmente provenientes del Banco Central italiano, del cual fue alto dirigente.

Su fama que sigue por las nubes se la ganó tras ser nombrado presidente del Banco Central Europeo. Compró bonos públicos a diestra y siniestra de los 28 países miembros (entonces Gran Bretaña era miembro de la UE), en medio de una dura crisis del área, poniendo a la UE de nuevo en crecimiento.

Los dirigentes europeos, especialmente los alemanes, que son el país lider, creen mucho más en la palabra de Draghi que en la del gobierno italiano, por lo que el momento es de franco idilio. Italia, segundo país manufacturero de Europa detrás de Alemania, es el que más ayuda ha recibido y del que se confía será uno de los motores nacionales de la recuperación del continente.

Italia cayó un diez por ciento de su riqueza nacional en 2020, el primer año de la pandemia y se afrontó la situación haciendo crecer la deuda estatal en forma vertical, para dar una parte a los trabajadores, empresarios y comerciantes seriamente afectados.

Se estima que el año pasado se perdieron un millón de empleos.

“El momento Italia”​

El ministro de la Administración Pública, Renato Brunetta, un buen economista del partido de Silvio Berlusconi, anunció eufórico que se está viviendo “el momento Italia”.

Dijo que se espera que en el segundo semestre de este año habrá no una recuperación sino un verdadero boom económico ante la sensación de que las fuerzas de este país de hormigas productivas están listas para entrar en una fase de expansión.

“Creceremos entre un 4 y 5%”, afirmó Brunetta mirando al cielo.

Los italianos tienen el más alto nivel de ahorro interno de Europa y están segundos en el mundo detrás de Japón. La normalización implica estimular los consumos. Los bonos estatales se han adecuado al regreso de la inflación después de varios años a cero y menos cero. Actualmente llega al 2% anual.

Más de 800 empresas están aprontando en locales propios en todo el país sitios de vacunación, que incluirá no solo a los trabajadores sino también a sus familias.

Desde el jueves 3, anunció el general Figliuolo, se darán por terminadas las franjas de edad que deben reservar lugar para ser vacunado. Falta terminar de encarrilar al área de 60-70 años, que son más de cinco millones de personas y que registran altos porcentajes de contagiados y fallecidos. Pero el tema está ya bajo control.

La amenaza de la variante india y otros peligros que vienen de la misma difusión de la pandemia por todo el mundo, ha convencido al gobierno que ha llegado el punto de acelerar la segunda dosis de las inmunizaciones.

Se estudia por ejemplo en el caso de Pfizer, la vacuna más popular, volver a los 21 días de plazo entre la primera y segunda inyección. El plazo fue alargado a 35 días para favorecer el aumento de las primeras dosis.

Estos planes están facilitados por la prometida llegada de al menos veinte millones de dosis en junio. Este lunes se anunció que el objetivo es arribar a cinco millones de vacunaciones por semana.

Figliuolo aclaró que como en todas las franjas hay porcentajes de población que no se presentan a la vacunación, el Estado aplicará el sistema de llamadas directas.

Vacunar en casa

Quienes se retrasen serán convocados. Además se ha aumentado el numero de patrullas que recorren sobre todo las ciudades más pequeñas, los pueblos y las aldeas para vacunar en casa, sobre todo, a los más viejos aún no vacunados.

La vacunación sigue siendo voluntaria y el clima de confianza que se difunde como mancha de aceite por la península facilitará que los indecisos acepten ser vacunados.

Apertura segura de clases

Esta semana han comenzado las inoculaciones de los alumnos del último año de los colegios secundarios. A nivel europeo se anunció el viernes que ha sido aprobado por el ente GEMA del fármaco la vacunación Pfizer de los adolescentes de 12 a 15 años.

El objetivo es inocular a los alumnos, profesores y personal docente de las primarias y secundarias, “para inmunizar a la escuela italiana” y garantizar una apertura segura de las clases en setiembre.

Si todo va bien, en el horizonte hay otro problema que será titánico pero que en las condiciones actuales Italia podrá afrontar positivamente.

Pfizer y otros laboratorios avisaron que será necesaria aplicar una tercera dosis para incluir a las nuevas variantes más peligrosas.

Además, el año que viene comenzará otro ciclo anual en que será necesario renovar la vacunación contra el virus y sus variantes a los 60 millones de italianos.

Ya se estudia en EE.UU. un sistema paracombinar las inoculaciones contra la gripe y contra el coronavirus. Aún entre los más optimistas el realismo impone aceptar que probablemente el Covid no desaparecerá.

En la historia de las pandemias, solo un virus pudo ser totalmente eliminado: el de la viruela.

Roma, corresponsal

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Fuente Clarin