Por Gabriel Di Nicola
“No hay ningún comportamiento fuera de las normas”, dijo un colaborador de Sergio Berni, que deslindó responsabilidades en la Justicia; se abrió una investigación por presunto abuso de autoridad de los uniformados
Una investigación que habilitó un operativo para buscar un teléfono celular robado en derivó en un escándalo. Por orden de la Justicia, la policía bonaerense hizo un allanamiento en una casa de Villa Elisa,en La Plata, donde vive un funcionario del Ministerio de Seguridad. Ahora se abrió una causa para determinar si hubo un abuso de autoridad por parte de los uniformados a cargo del procedimiento.
Según informaron a LA NACION fuentes judiciales, en la propiedad allanada vive un funcionario de Registro Público de Controladores de Admisión y Permanencia, que depende de la Dirección Provincial Para la Gestión de la Seguridad Privada de la cartera conducida por Sergio Berni.Buscaban un teléfono celular robado y terminaron allanando la casa de un funcionario
“No hay ningún comportamiento fuera de las normas. La policía funciona como auxiliar de la Justicia”, explicó un colaborador de Berni. El operativo, hecho en una casa situada en 132, entre 429 y 430, Villa Elisa, fue ordenado por el juez de Garantías de La Plata Guillermo Atencio tras un pedido de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°1 platense, conducida por la fiscal Ana Medida.
La fiscalía investiga el robo en una casa de Villa Elisa ocurrido en la madrugada del sábado pasado, cuando delincuentes, después de romper un vidrio de una ventana, ingresaron en la propiedad. Mientras los residentes dormían, los ladrones se apoderaron de un iPhone, una notebook y una guitarra eléctrica, entre otros objetos de valor.
“A partir del rastreador satelital se pudo ubicar el teléfono celular robado. No hubo error de la fiscalía en pedir el allanamiento y tampoco del juzgado en ordenar el operativo. La prueba aportada por la fiscalía era suficiente para ordenar el procedimiento”, dijo una fuente judicial.
Según otras fuentes, en el allanamiento, el personal de la comisaría de Villa Elisa y del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) derribó una puerta y le arrojó gas pimienta a un perro.
La primera parte del allanamiento quedó registrada en una filmación. “¡Policía, policía!”, gritó uno de los uniformados que irrumpió en la propiedad del funcionario; casi al unísono se escuchan estruendos de proyectiles de fogueo o de salva, utilizados para intimidar en la irrupción.
“¡¿Qué pasa, qué pasa?!”, alcanza a preguntar, desesperada, una mujer desde el interior del inmueble. Después solo se oyen gritos, hasta que se corta la filmación.
Lo cierto que el teléfono celular robado no se encontró. “Ahora se abrió una investigación para determinar si en el operativo hubo abuso de autoridad. Los allanamientos se puede hacer bien o mal”, se explicó. La mujer del funcionario allanado es empleada de la policía bonaerense.
Fuentes de la Auditoría General de Asuntos Internos (AGAI) del Ministerio de Seguridad bonaerense explicaron a La Nación se le tomará declaración testimonial al propietario del inmueble y se analizará el parte policial hecho sobre los resultados del allanamiento.
“Los motivos del allanamiento estaban fundamentados: el teléfono celular robado fue geocalizado en el lugar que se decidió hacer el operativo. Los uniformados aseguraron que no sabían que en la casa vivían un funcionario del Ministerio de Seguridad”, dijeron desde la AGAI.
Fuente La Nación