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Pasaron cinco días y todavía es un misterio qué pasó con Marcela Verónica Rota (43), quien fue asesinada en la esquina de Rafaela y Díaz Vélez, en el límite entre Ciudadela y Ramos Mejía. Su familia apunta contra su ex pareja y el padre de su hija, que tenía denuncias por violencia de género, aunque él asegura que al momento del hecho estaba con su actual mujer.
Marcela tenía una hija de 8 años y hace décadas se desempeñaba como trabajadora bancaria, actualmente en el BBVA Argentina desde 2007. El jueves pasado, día del homicidio, dejó a la nena al cuidado de su abuela y fue a un comercio para hacer las compras, a unas 17 cuadras del lugar del hecho.
Los investigadores no descartan ninguna hipótesis. No hay imputados por el homicidio de Marcela, que chocó su auto contra una casa, a muy baja velocidad, cuando perdió la conciencia después de recibir un disparo en el pecho.
Marcela Verónica Rota fue asesinada de un balazo en el pecho y chocó contra un árbol.
Tampoco están los resultados de las pericias en el arma, hallada a 200 metros del lugar donde murió la mujer, y aún buscan testigos que hayan podido ver o escuchar algo que sirva para orientar la investigación.
Primero hablaron de un robo y buscaron a los presuntos ladrones en las cámaras de seguridad. En el lugar donde creen que ocurrió el disparo no hay dispositivos de la Municipalidad de Tres de Febrero que pudieran haber tomado al asesino, por eso intentaban recuperar imágenes de cámaras privadas para intentar identificarlo.
Pero la familia de la víctima y los registros judiciales abrieron una nueva hipótesis sobre el crimen: Marcela podría haber sido víctima de un femicidio.
Hacía más de tres años que Marcela estaba divorciada del padre de su hija, el cirujano plástico Santiago Nicolini (46), que tiene su consultorio en el barrio de Recoleta pero vive en un country de Tigre.
La víctima se había atrevido a denunciar a Nicolini, que tenía una restricción de acercamiento por violencia de género, ordenada por un Juzgado de Familia de La Matanza, además de causas civiles vinculadas a la cuota alimentaria de la hija que tenían en común.
La nena quedó al cuidado de sus abuelos y su tía materna hasta tanto avance la investigación. Según pudo saber Clarín, Nicolini no tenía vínculo con su hija ni la había visto desde que comenzó la pandemia de Covid-19.
La versión de la familia
La familia de Marcela, todavía conmocionada por el crimen, desconfía de la versión de un “homicidio en ocasión de robo”. Para ellos, fue un femicidio y el ex marido habría estado involucrado.
“Hacía más de tres años que ellos no tenían vínculo. Nicolini no tiene causas penales de ningún tipo, lo que hay son presentaciones pero en el fuero civil”, lo excusó el abogado Silvio Herrero, que representa a Nicolini.
Fuentes de la investigación confirmaron a Clarín que “aún no hay ningún imputado por el crimen” y que “continúan con la recolección de prueba sin descartar ninguna hipótesis”.
Lo cierto es que, este miércoles, Nicolini debería presentarse a los Tribunales de San Martín para declarar espontáneamente ante el fiscal Ignacio Correa, de la UFI N° 5, a cargo de la investigación.
El cirujano plástico no fue citado ni como testigo ni para una declaración indagatoria, sino para dar su versión de los hechos, lo que dejaría la puerta abierta para que pueda ser imputado cuando avance el expediente.
Nicolini buscará desmentir las denuncias de la familia de la víctima, que lo considera el principal sospechoso del asesinato de Marcela. Según él, ese día “no salió de su casa” en un barrio cerrado de Tigre y, para la hora del hecho, “estaba junto a su actual pareja”, a quien presentaría como testigo.
El arma homicida.
Lo cierto es que las pericias sobre el arma que hallaron abandonada a metros del lugar donde Marcela fue hallada sin vida serán determinantes para identificar huellas dactilares o rastros del asesino.
Si bien la fiscalía no ha indicado que -hasta el momento- haya pruebas contundentes que sustenten la hipótesis del femicidio, no descartan que pueda tratarse de un crimen por encargo o de alguna otra línea de investigación.
Violencia de género
Desde el 1° de enero al 31 de mayo de 2021, hubo 115 femicidios, 6 transfemicidios y 8 femicidios vinculados de varones, según datos del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano”, que dirige La Casa del Encuentro.
Este sábado, alrededor de las 17, Roberto Arnaldo Escobar (29) llevó a su pareja a una guardia de Garín con una herida de bala en la cadera. Intentó simular que había sido víctima de un robo pero quedó detenido y acusado por el femicidio de Karen Gisele López (25).
EMJ
Fuente Clarin
