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Por
Sebastián Maril
Economista
La Provincia de Buenos Aires esta semana publicó los detalles de su nueva Oferta de Canje y con ella llegó la noticia que un importante acreedor había aceptado los términos y condiciones propuestos por la gobernación.
GoldenTree Asset Management, el mayor acreedor de deuda provincial en default, y la misma Provincia, anunciaron temprano el día miércoles que habían alcanzado un acuerdo sobre los términos de una reestructuración que, una vez implementada, otorgará al mayor distrito argentino un alivio de 4.450 millones de dólares hasta el 2024. Se necesitaron catorce meses y dos ofertas de canje oficiales para que Kicillof finalmente llegara a un acuerdo con un acreedor importante.
Inmediatamente, los bonos en dólares y en euros emitidos por la provincia subieron hasta 5 puntos en la apertura y se negociaron a su nivel más alto en diez meses.
Sin embargo, por la tarde, el Grupo Ad Hoc (“AHG”) de acreedores de bonos de la provincia, que dicen representar el 40% de todos los bonos provinciales en circulación, emitió un comunicado diciendo que no respaldaba la última propuesta provincial. “La Provincia eligió un camino desafortunado hacia el lanzamiento de su oferta que involucró discusiones bilaterales con ciertos tenedores de bonos. La Provincia se negó en múltiples ocasiones a entablar negociaciones directas con el AHG, a pesar de sus reiteradas invitaciones para que celebre acuerdos de confidencialidad destinados a facilitar el diálogo”, explicaron los acreedores en un comunicado.
De todos modos, esta es la primera vez desde abril de 2020 que tenemos una oferta con la que la Provincia y un acreedor se ponen de acuerdo, ofreciendo al mercado una muy buena referencia que muestra hasta dónde está dispuesta a ir PBA para reestructurar su deuda. Hasta el día de hoy, todo lo que tuvimos fueron una serie de intercambios no oficiales entre los representantes provinciales y el AHG. Pero nada oficial.
Entonces, ¿hasta dónde está dispuesto a llegar el gobernador Axel Kicillof?
En primer lugar, Buenos Aires ha ofrecido reducir el número total de bonos de once a solo cuatro, todos con vencimiento en 2037. Todos los tenedores de Bonos Elegibles (excepto los tenedores de Bonos 2035 denominados en dólares y en euros) tendrán derecho a recibir “Nuevos Bonos 2037 A” denominados en dólares o “Nuevos Bonos 2037 A” denominados en euros. Los tenedores de Bonos 2035 denominados en dólares y en euros, recibirán “Nuevos Bonos 2037 B” denominados en dólares o “Nuevos Bonos 2037 B” denominados en euros.
Y en segundo lugar, Buenos Aires también acordó pagar en efectivo los intereses devengados hasta el 30 de junio y actualmente en default. Todos los acreedores que ingresen al canje, recibirán el 100% de los intereses devengados sobre sus tenencias que serán pagados 10% en efectivo y 90% en los Nuevos Bonos canjeados.
Recordemos que la Provincia de Buenos Aires hoy tiene una deuda internacional de 7.200 millones de dólares, denominada en dólares y en euros.
La propuesta de la Provincia es un paso en la dirección correcta. Otras nueve provincias argentinas han reestructurado con éxito sus deudas en 2020 y en 2021, todas con estructuras similares (cupones de aumento, pagos de amortización) y con valores de recuperación de la inversión tan bajos como 59 centavos de dólar (sobre 100) y tan altos como 75 centavos. El valor de recuperación estimado de los Nuevos Bonos es de 59,8 centavos.
Este es un buen punto de partida para unas negociaciones que necesitan que ambas partes concedan más espacio si quieren llegar a un acuerdo con el grupo duro de acreedores. Buenos Aires comenzó a negociar a principios de 2020 con un Valor Presente Neto (VPN) de 47, mientras que los acreedores comenzaron en 75.
Sin embargo, los próximos 15 días mostrarán si la propuesta revisada de la Provincia encuentra suficiente apoyo de la mayoría de los acreedores, lo que obligará al AHG a aceptar los términos actuales o convertirse en holdouts.
¿Qué sucede ahora? Muy posiblemente el gobernador Kicillof y su equipo económico saldrán a destacar públicamente la importancia del acuerdo con Golden Tree. Kicillof, un conocido enemigo de Wall Street, quiere que ciertos miembros del AHG se separen del grupo y acepten la nueva oferta. El gobernador también puede atraer a los inversores minoristas cansados de esperarpara que acepten la última propuesta y generen apoyo contra los fondos que muestran cierta inflexibilidad.
Los acuerdos de confidencialidad firmados con de AHG vencieron el viernes, al igual que la vigésima extensión del plazo para aceptar la oferta de canje. La Provincia ya anunció una nueva extensión y los tenedores de bonos ahora tienen hasta el 13 de agosto para unirse a Golden Tree y aceptar los términos nuevos y modificados.
Con un acuerdo de reestructuración, si efectivamente ocurre, los acreedores retirarían la demanda iniciada en una corte neoyorquina que busca recuperar todos los intereses atrasados e impagos por la gobernación bonaerense. El fiduciario y ciertos acreedores, presentaron una serie de demandas colectivas contra la Provincia para presionar a Kicillof a sentarse a negociar. Hoy mismo, tres provincias argentinas permanecen en default: Buenos Aires, La Rioja y Tierra del Fuego. Dos de ellas, Buenos Aires y La Rioja, tienen causas abiertas en Nueva York. Recordemos que Entre Ríos, que ya acordó con los acreedores, también fue presionada a cerrar un acuerdo mediante una demanda judicial presentada en la ciudad norteamericana.
Fue una semana positiva para la Provincia. Solo resta saber si, en el mes de agosto, el optimismo que envuelve la reestructuración de su deuda, termina en en acuerdo macro o, de lo contrario, continuarán los litigios. Kicillof ya nos ha sorprendido en años recientes.
Fuente Clarin
