Jerusalén, 1 ago (EFE).- El ministro de Exteriores de Israel, Yair Lapid, habló anoche con su homólogo de EE.UU., Antony Blinken, del reciente ataque en el mar Arábigo contra un buque operado por una empresa de un multimillonario israelí del que responsabiliza a Irán, mientras reclama una condena internacional, informó en un comunicado una portavoz del Ministerio de Exteriores israelí.
Lapid trató con Blinken “el ataque al barco en el Golfo de Omán, la actividad conjunta contra el terrorismo iraní y la formulación de una respuesta internacional y efectiva” contra Teherán, informó dicho comunicado.
Según concretó, este organismo activó los canales diplomáticos “en todos los escenarios relevantes” y en varios países “para promover” una “condena y respuesta internacional” a la agresión del pasado jueves contra un buque cisterna que navegaba cerca de Omán. El barco, llamado “Mercer Street” y de propiedad japonesa, es gestionado por la empresa Zodiac Maritime, del israelí Eyal Ofer.
El ataque -perpetrado por un dron- causó la muerte de dos miembros de la tripulación, un ciudadano rumano y otro británico, e Israel acusa directamente a Irán de haber cometido la agresión.
Ante ello, el máximo representante de la diplomacia israelí se puso también en contacto con sus homólogos de Reino Unido y Rumanía para expresarles sus condolencias, y trató “la amenaza que representa Irán, que causa daños de manera constante a civiles inocentes”.
Cuando fue atacado en la noche del jueves, el navío estaba en el norte del océano Índico mientras iba hacia Emiratos Árabes Unidos.
El incidente despertó las alarmas entre las autoridades israelíes. Según medios, altos cargos gubernamentales y del aparato de Defensa se reunieron de urgencia para tratar el asunto, y ahora intentan poner en alerta de nuevo a los países occidentales para denunciar el alcance de las presuntas actividades iraníes en Oriente Medio.
Israel ve a Teherán como su principal enemigo en la región y una amenaza existencial. Desde el estallido del conflicto armado en Siria bombardea intermitentemente contra posiciones de milicias iraníes o aliadas que apoyan a las fuerzas de Bachar al Asad.
Además, se opone fervientemente al acuerdo nuclear de 2015 entre varias potencias y Teherán, al que EE.UU. plantea volver después de que el expresidente Donald Trump se retirara de él en 2018.
Irán no se ha pronunciado sobre el reciente ataque contra el carguero, pero este incidente parece marcar un nuevo capítulo de las tensiones entre Israel y la República islámica, tras otras agresiones y sabotajes contra barcos en los últimos dos años en el Golfo, una dinámica que se intensificó en los últimos meses. EFE
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Fuente Infobae