Como sucedió en la primera mitad del año, durante julio volvieron a reducirse los déficits del Estado.
Así, por el menor gasto sanitario, la caída de jubilaciones y pensiones, la disminución en el pago de intereses de deuda y la expansión de los ingresos, durante julio se redujeron los déficit primario (-32,1%) y financiero (-27%) en relación a un año atrás, según los números de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
Los ingresos de la Administración Nacional totalizaron $ 640.206 millones, fundamentalmente porque “la devaluación y los precios del complejo sojero estimularon la recaudación de los Derechos a la Exportación”, es decir, de lasretenciones.
Por su parte, durante julio, “se transfirieron $ 180.000 millones en concepto de utilidades del Banco Central que cubrieron casi en su totalidad el déficit financiero”, aclara el Informe.
Por su parte, los gastos primarios sumaron $ 771.528 millones y cayeron 2,5% interanual fundamentalmente por la caída de jubilaciones y pensiones y transferencias corrientes a provincias, pero también debido a que las erogaciones en programas sociales destinadas a la emergencia sanitaria fueron inferiores en la ejecutadas en julio del año pasado.
Así las cosas, las jubilaciones y pensiones cayeron 5,5% por la mayor inflación en relación a los aumentos de los haberes. “La movilidad de los haberes del régimen general en las cuatro últimas recomposiciones no logró compensar la inflación: 36,8% vs 51,8%”, dice el Informe.
También las pensiones no contributivas tuvieron un retroceso del 6,3% interanual. En agosto, esto parcialmente se compensó con un bono de $ 5.000 a los haberes más bajos.
Las transferencias a las Universidades ($ 21.603 millones) tuvieron una reducción real del 11,1%, fundamentalmente porque la paritaria del sector en los 12 meses a julio tuvo un aumento del 35% por debajo de la inflación (51,8%).
Los intereses de la deuda ($ 51.901 millones) se contrajeron el 9,8%. Se abonaron intereses a los títulos en dólares y euros de la reestructuración de la deuda .
En cambio, los subsidios energéticos se incrementaron 59,2%, en gran medida para compensar el aumento en el precio mayorista de la electricidad.
Hubo también fuertes aumentos en los gastos de capital (39,4%) y en la inversión real directa (43,2%). Los aportes de capital a Aerolíneas Argentinas se incrementaron un 69,9%.
Al 31 de julio, el presupuesto inicial del ejercicio aumentó en $ 293.639 millones, que fueron a programas sociales, la adquisición y distribución de las vacunas contra el COVID-19 ($ 76.436 millones destinados a la compra y el servicio de traslado de las dosis), y las transferencias a Energía.
NE
Fuente Clarin