Sídney (Australia), 16 ago (EFE).- Australia y Nueva Zelanda informaron este lunes que evacuarán a sus ciudadanos y a decenas de afganos que trabajaron para ellos en Afganistán, debido al deterioro de la situación tras la llegada de los talibanes a Kabul.
Alrededor de 130 australianos se encuentran en Afganistán trabajando para organismos como Naciones Unidas y oenegés, entre otras instituciones, informó en un comunicado el primer ministro australiano, Scott Morrison, y su titular de Defensa, Peter Dutton.
El gobierno australiano también ayudará a “aquellos a los que se les ha otorgado visados humanitarios y a quienes están en proceso de pedir protección”, precisó Morrison, sin dar detalles de la misión militar.
Pero, según la cadena pública ABC, Camberra ya aprobó este lunes un plan de evacuación militar que incluye el despliegue de unos 250 soldados y un avión C-17 de la fuerza aérea.
Por su lado, Nueva Zelanda indicó que ayudará en la evacuación de 53 de sus ciudadanos y al menos 37 afganos que trabajaron para el contingente militar neozelandés desplegado en el país asiático.
La primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, anunció este lunes a periodistas en Wellington el despliegue de un avión C-130 y de un número indeterminado de soldados por al menos un mes para ayudar en la evacuación, según un operativo en el que podría trabajar conjuntamente con Australia.
“En este momento planeamos enviarles durante un mes, pero no estamos seguros de que la situación de seguridad nos permita operar durante tanto tiempo, así que haremos todo lo que podamos en las próximas semanas”, dijo el jefe de Fuerza de Defensa neozelandesa, Kevin Short, en rueda de prensa junto a Ardern.
Los dos gobiernos de Camberra y Wellington también expresaron su preocupación por las vidas de los civiles y pidieron a los talibanes que respeten los derechos humanos, especialmente los de las mujeres y las niñas.
Australia cerró en mayo su embajada en Kabul, previa a la retirada de los últimos soldados australianos desplegados en Afganistán, siguiendo así los pasos de Estados Unidos y la OTAN.
El país oceánico llegó a desplegar unos 39.000 soldados en Afganistán, lo que se consideró como la mayor aportación militar de un país fuera de la Alianza Atlántica, y desde entonces mantiene reducidos destacamentos militares dedicados a labores de capacitación y entrenamiento.
Por su lado, Nueva Zelanda desplegó un total de 3.500 soldados.
Fuente Infobae