Dos días después de garantizar su continuidad como gobernador de Corrientes hasta 2025 con una amplia e histórica victoria en las elecciones realizadas en esa provincia este domingo, Gustavo Valdés se adentró en el debate que acaparó la agenda nacional en las últimas horas, y se posicionó en la vereda opuesta a la de Victoria Tolosa Paz, quien deslizara que “en el peronismo siempre se garchó”.
Valdés planteó que, pese a que el tema se instaló con firmeza no solo en el ámbito político sino también en el resto de la sociedad, prefiere apuntar hacia otros objetivos “urgentes”. El principal, “el hambre”. Y no pareció casual, habida cuenta que la mesa que iba a ser la solución a esa problemática, estaba en la órbita de Tolosa Paz.
“Todo el mundo está hablando de eso, pero nadie escucha lo que dice un primer candidato a diputado de una provincia”, lamentó en primera instancia quien se impuso con el 76.75% de los votos en los comicios para gobernador provincial, ante el candidato kirchnerista Fabián Ríos.
En diálogo con la señal A24, el radical no ocultó su malestar debido a la situación generada por los dichos de quien estuvo al frente del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, conocido como la Mesa contra el Hambre. Ese cargo lo ocupó oficialmente hasta hace una semana, cuando a través del Boletín Oficial se confirmó su renuncia, presentada para competir en las próximas elecciones de medio término.
Los resultados de la gestión de la candidata del Frente de Todos aún son al menos nebulosos.
Para Valdés, “la urgencia es el hambre”.
“Hoy todos están hablando de lo que dice Tolosa Paz, y cuando escuchamos que se habla de sexo a nosotros nos da bronca, porque nuestra urgencia es el hambre”, insistió el dirigente correntino.
El último domingo, Tolosa Paz, precandidata a diputada bonaerense por el oficialismo, afirmó que “no hay felicidad de un pueblo sin garchar” y que su espacio pretende “hacer posible la felicidad de un pueblo y la grandeza de una patria”.
“Perdón, nosotros somos así. Lo que digo es parte importante de la vida: el baile, el disfrute, el goce, no lo vamos a ocultar. Somos seres humanos, nos gusta gozar, nos gusta divertirnos”, amplió.
Cuarenta y ocho horas después, buscó defenderse, pero el tema ya estaba en la órbita popular: “Me sacaron de contexto, yo no hablé de mi sexualidad y hasta pedí perdón por usar esa palabra”.
“Es una palabra que uso yo íntimamente con mis hijos, les digo que si garchan compran preservativos, es algo con mis hijos y mi hija. Hablé de muchas cosas y fue increíble que tomaran eso”, indicó.
“La bronca de la gente”
Valdés, cuadro del radicalismo que gobierna Corrientes desde 2017, pidió que la clase dirigente “deje de lado los egos” para atender y satisfacer las demandas de una sociedad que está “con bronca”.
“La gente quiere que la política le resuelva sus problemas. Y el problema en el norte no es si tenemos sexo, es si comemos al otro día. Hay mucha pobreza”, argumentó.
El gobernador Valdés fue reelegido por un amplio margen sobre el candidato K
En esa dirección, completó: “Cuando nosotros hablamos de temas triviales, a la gente le da bronca la frivolidad de la política. Y se enoja. Eso genera una situación que no es buena para el clima político”.
Curiosamente, al terminar la entrevista, Valdés se puso en modo fan y le pidió una selfie a la conductora del programa, Viviana Canosa, quien accedió entre sorprendida y divertida. Tal vez fue la inercia de la campaña.
DS
Fuente Clarin