Sabina Frederic y la foto simbólica en una ventana de la Casa Rosada

Después de la ola de renuncias de funcionarios vinculados a Cristina Kirchner, los ministros más leales a Alberto Fernández se reunieron con él en la Casa Rosada. Allí estuvo Sabina Frederic, una de las personalidades más esmeriladas por el kirchnerismo duro y que dejó una foto simbólica: se asomó a una ventana de la Casa de Gobierno y tomó aire en una tarde que no dio respiro.

Wado de Pedro y al menos una decena de ministros y otros funcionarios dejaron su puesto a disposición del Presidente, este miércoles al mediodía. Ocurrió tres días después del cimbronazo que significó la derrota estrepitosa del Frente de Todos en las elecciones PASO 2021 y justo cuando el kirchnerismo presiona para que se ejecute una renovación forzada en el gabinete.

La ministra de Seguridad de la Nación fue una de las pocas en salir a respaldar públicamente al Presidente. “Todo mi apoyo a Alberto Fernández, síntesis de la unidad popular para lograr el país que queremos. El Frente de Todos es la garantía para que la voluntad del pueblo expresada en 2019 sea una realidad”, escribió en su cuenta de Twitter, pasadas las 18.

Después trascendieron las fotos en las que, asomada a la ventana de la Casa Rosada, buscaba un poco de aire en una tarde vertiginosa.

Frederic es una de las pocas ministras del gabinete, junto con Elizabeth Gómez Alcorta (Mujeres, Géneros y Diversidad) y Carla Vizzotti (Salud, reemplazó a Ginés González García).

Marcela Losardo (Justicia) y María Eugenia Bielsa (Desarrollo Territorial y Hábitat) también formaron parte del gabinete inicial. Pero fueron removidas luego de que Cristina alertara sobre “funcionarios que no funcionan”.

Las reemplazaron dos hombres cristinistas: Martín Soria y Jorge Ferraresi. Uno presentó su renuncia; el otro habría ofrecido -verbalmente- su cargo a Alberto F.

Ahora, casi un año después de las críticas de la vicepresidenta, los principales apuntados son Martín Guzmán y Santiago Cafiero.

Pero Frederic no está demasiado lejos en la lista de reproches K. A diferencia de ellos, no puede ofrecer en su curriculum la renegociación de la deuda que encabezó el ministro de Economía en agosto de 2020 ni la fiel obstinación del jefe de Gabinete.

Y la funcionaria de registro sociológico está siempre en la cuerda floja, a pesar de salirse de su propia área de confort académico para instalar en campaña una reelección para Alberto F. que hoy se ve más lejana que nunca.

La sombra de Berni y un caro error

Su designación al frente del ministerio de Seguridad estuvo cuestionada desde el inicio mismo del Gobierno. De formación en las ciencias humanas y sin antecedentes de gestión en la materia, la antropóloga recibió críticas de la oposición y del propio oficialismo, a través de Patricia Bullrich y Sergio Berni, respectivamente.

En los casos de otros ministros albertistas, el cristinismo marca la cancha con funcionarios ubicados estratégicamente en cargos de segundo orden. Es el famoso loteo del Frente de Todos que ahora queda en evidencia. La sombra de Frederic llega desde afuera del ministerio nacional, desde la Provincia de Buenos Aires.

No fueron pocos los chispazos. Berni se trenzó con Frederic por la derogación del protocolo para el uso de pistolas Taser y, en plena cuarentena por coronavirus, la enfrentó públicamente por los retenes en los puentes que unen a la Ciudad con la Provincia de Buenos Aires.

Hace días nomás apareció en Rosario como líder de un operativo antinarco, luego de que Frederic comparara los homicidios en esa urbe con los datos de asesinatos en territorio porteño.

En el marco de la división en el oficialismo, el funcionario bonaerense siempre remarca su pertenencia: asegura que su “jefa política” es Cristina Kirchner. “Cuando Cristina dice vamos para allá, a nadie se le ocurre ir para el otro lado. Alberto Fernández​ es el Presidente y conduce un espacio de coalición, pero nuestro espacio político es conducido por Cristina”, dijo a mediados de 2020.

A pesar del desgaste con Berni, Frederic intentó defender en los últimos meses a Alberto Fernández de las numerosas críticas que le llegan desde la oposición y también desde el interior del oficialismo. En esa línea, antes de la derrota en las PASO, le dio su respaldo al Presidente para buscar la reelección en 2023.

“Las acciones en el Gobierno llevan tiempo. Ocho años son necesarios pero eso no tiene que dar lugar a la demora en la ejecución de acciones. No tiene que hacer dormir, sino todo lo contrario. Si hay ocho años, mejor”, expresó la ministra nacional, en sintonía con los deseos de Juan Zabaleta y Daniel Arroyo.

A pesar de su defensa del Gobierno Nacional, Frederic cometió un desliz en plena campaña electoral que le pasó factura al Frente de Todos en las primarias del domingo pasado.

En plena recta hacia las PASO y con el escándalo del Olivosgate aún en llamas, le preguntaron por los argentinos que quieren emigrar para escaparse de la ola de inseguridad en el país. “Suiza es más tranquilo, pero más aburrido”, respondió la ministra. Así, abrió un nuevo flanco para las críticas electoralistas a un gobierno golpeado por la economía y por la gestión de la pandemia.

Este miércoles, con un mensaje en Twitter trató de apuntalar, otra vez, a Alberto Fernández en un día que (casi) no ofreció respiro.

DS

Fuente Clarin