Empresarios que almorzaron con Alberto se llevaron promesas. En IDEA hay pesimismo.Guillermo Moreno agitó fantasmas.
A patir del 14 de Noviembre todo puede ser puro vértigo. La natauraleza de las cosas que plantearon la pandemia para los oficialismos, es decir reveses elecotorales, en nuestro país adquieren tintes dramáticos. Opositores expuestos a la renovación prefieren pensar que no habrá vacío de poder sino mas bien una fagocitación propia del caldo peronista.
El fuego interno peronista lo comenzó a avivar en la previa, el inefable Guillermo Moreno. Lejos de amilanarse por ser unno de los perdedores de las PASO, siente contar con la patente del “peronismo pura cepa” que viene advirtiendo que haber elegido a Alberto fue una franc equivocación.
“Hay que adelantar las elecciones y elegir a un gobierno que sea apto“, dijo toreando el escenario. Su palabra tiene escaso peso en teoría pero es un termómetro del sacudón que significaría para el gobierno perder en Noviembre por mayor diferencia.
Algunos encuestadores precipitan esa posibilidad dando una ventaja de Santilli sobre Tolosa de más del 7 % en provincia, Se observa que el científico radical, Facundo Manes, sigue creciendo en su imagen de algo nuevo y la derecha de Esperte no le hace tanto daño al PRO como en el ciudad Milei.
La oposición divide sus miradas. Mientras que el ala dura de Juntos cree necesario tener a mano un plan de emergencia y ven que el Cristina va por todo puede ser una réplica similar a la crisis que tuvieron con la derrota del 2009, los filo radicales ven, en cambio, que la Señora es la garantía de que no habrá vacío de poder, en todo caso si mucho ruido político y económico.
¿Qué Alberto habrá después de noviembre? Las comparaciones odiosas pueden correr la pantalla de un De la Rúa a un Isabel. Dólar y reservas serán muy escasos. El esquema menos malo seríá que Cristina tenga botonera y el Jefe de Gabinete, Juan Manzur, asuma lo institucionar en todas sus formas.
El temas es como llegar sanos y salvos al 2023. Primero está el año próximo que será de una gran incertidumbre hasta que se acuerde con el FMI.
Otro colorado, el empresario Francisco de Narváez , quien participó de un almuerzo con el presidente, fue el vocero de una mensaje algo tranquilizador: “ Alberto nos dijo que Cristina tambien quiere un acuerdo con el Fondo“.
Francisco de Narváez , quien participó de un almuerzo con el presidente, fue el vocero de una mensaje algo tranquilizador: “ Alberto nos dijo que Cristina tambien quiere un acuerdo con el Fondo“.
El empresario del sector alimenticio, tiene siempre la cara de ese dirigente pol+itico que guarda la chapa de haberle ganado al Kirchnerismo. Fue en la comida quien hizo de puente con los tros CEOS que asistieron a la convocatoria algo desconfiados,
Francisco está en un modo pacificador. Sabe al igual que muchos otros empresarios que si esto se rompe pueden acontecer situaciones más drmáticas que en el 2001. Por eso hasta le tiró un centro a el gobierno desmitiendo el título de Clarín : ” e sincorrecto decir que el gobierno está pateando el acuerdo”.
Muchos de los que no fueron invitados a la Rosada comenzaron a disertar en el coloquio IDEA. Ellos y los otros comparten una agenda de reclamos como eliminar la doble indeminización. “Esperen que pasen las elecciones”, escucharon.
La apelación a la respnsabilidad de todos los actores del quehacer nacional es un dato clave para que la tormanta no anticipe el huracán. Ver para creer.