Se trata de presuntos seguimientos y armados de informes que realizó la AFI. Puede presentar un escrito o responder preguntas ante el juez.
Por primera vez desde que dejó la presidencia de la Nación, Mauricio Macri se presenta a declarar como imputado en una en la que lo acusan de haber ordenado presuntas tareas de inteligencia ilegal sobre los familiares del ARA San Juan. La cita la fijó el juez Martín Bava a quien la Cámara federal de Mar del Plata le ordenó que “guarde la mesura y adecuada compostura al resolver causas judiciales”.
El ex presidente deberá enfrentar una serie de acusaciones sobre las que deberá responder. Podrá presentar un escrito o responder preguntas ante el juez.
La base de la imputación son fotos, búsquedas en redes sociales, presuntos seguimientos y supuestas infiltraciones en marchas y testimonios de personas que habrían sido parte de la AFI.
En función de eso se le atribuyeron seis hechos a Macri según consta en la Justicia:
– 15 de enero 2018. 19:20 Malvinas Vallejos -familiar de una víctima del ARA San Juan- fue seguida por personal de la AFI y fotografiada.
Banderas en Dolores en apoyo al ex presidente Mauricio Macri. Foto Juano Tesone
– 3 de febrero de 2018, la AFI confeccionó un presunto informe sobre los reclamos de familiares
– 10 de febrero de 2018, la AFI informó que familiares iban a entregar una carta a Macri
– 2 de abril de 2018. La AFI espía y fotografía a Andrea Mereles y Malvina Vallejos en el Golf Club de Mar del Plata
– 15 de noviembre del año 2018. Familiares que protestaban en la Base Naval de Mar del Plata fueron fotografiados
– Una serie de presuntos seguimientos, fotos y confección de informes sobre los familiares.
La primera citación a indagatoria se había fijado para la semana pasada, pero Mauricio Macri pidió la postergación de la misma ya que había regresado recientemente del exterior. Además, su abogado Pablo Lanusse recusó al magistrado al considerar que había prejuzgamiento en los conceptos vertidos en la resolución con la que llamó a declarar al ex presidente.
La Cámara Federal de Mar del Plata confirmó al juez frente al expediente, pero fijó duras advertencias sobre su proceder: “Advirtiendo el estilo imperativo y “poco moderado” utilizado por el “a-quo” al exponer sus fundamentos y argumentaciones, todo ello nos permite, exhortar al Juez Bava, para que en lo sucesivo guarde la mesura y adecuada compostura al resolver causas judiciales”.
Juliana Awada compartió una foto junto a Mauricio Macri en su cuenta de Instagram apoyándolo antes de que vaya declarar a Doloers.
Por eso, le pidieron al juez Martín Bava, subrogante del juez Alejo Ramos Padilla, que “no olvide” que como funcionario judicial “debe actuar con el recato y la mesura pertinente que las circunstancias particulares aconsejen, como especialmente ocurre en el caso de autos, donde se formula una imputación penal a un ex Presidente de la Nación Argentina, vinculado con un acontecimiento que involucra profundos sentimientos personales que afectan a los familiares de las víctimas del suceso investigado, y que son caros en general a toda la sociedad, amén de haber acaecido el mismo, en el marco de un contexto histórico determinado y puntual”.
En ese contexto Macri se presenta en Dolores para declarar en la investigación “la participación de ex funcionarios en la realización de las tareas antes mencionadas, las cuales consistieron en la obtención de información, producción de inteligencia y almacenamiento de datos sobre personas, por su opinión política o su pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias y de derechos humanos”.
Entre esas tareas de “espionaje prohibidas por ley, se les imputó haber dirigido numerosas de ellas a obtener datos personales e información de los familiares y allegados de los tripulantes del submarino ARA San Juan, como así también del buque “El Repunte” y del buque “Rigel”, señaló la resolución judicial.
En este caso puntual, el juez explicó que las acciones que se le imputan a los ex funcionarios macristas, “buscaban influir en la situación política e institucional del país, puntualmente respecto a los reclamos que realizaban los mismos por el hundimiento de dichas embarcaciones y la consecuente muerte de sus familiares, como así también apuntaban a conocer sus actividades, los lugares donde se reunían, sus datos personales y los de su entorno, como la identificación de sus referentes”.
Todas estas tareas de inteligencia ilegal -sostiene la imputación-, “no contaron con autorización judicial alguna, ni fueron justificadas por órdenes de servicio fundadas en razones de seguridad interior o defensa nacional y se realizaron, además, con el objeto de influir en la opinión pública, en la opinión en esas personas y en el normal desenvolvimiento de las actividades de la agenda política de ese año, que según los criterios preestablecidos podían afectar a la gestión del entonces gobierno”.
En lo que refiere a Mauricio Macri, el magistrado entendió que las conclusiones a las que arribó muestra que las acciones “ilegales no fueron ejecutadas por los agentes de base que por motu proprio realizaron este espionaje ilegal, sino por el contrario, partieron de un interés político nacional que en el final de la cadena, respondía al entonces Presidente de la Nación, Ing. Mauricio Macri”.
Se lo acusa de seis hechos de espionaje, y al momento de sustentar la imputación se dijo que desde su cargo de Presidente de la Nación, “por lo menos en el período comprendido entre el mes de diciembre del año 2017 y finales del año 2018 ha ordenado y posibilitado la realización sistemática de tareas de inteligencia (…) consistentes en la obtención de información, producción de inteligencia y almacenamiento de datos sobre personas, por su opinión política o su pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias y de Derechos Humanos”.
Más específicamente, se le imputó a Macri “haber ordenado y posibilitado la realización de numerosas de ellas con el propósito de obtener datos personales e información de los familiares y allegados de los tripulantes del submarino ARA San Juan”.
Fuente Clarin