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El hecho que originó la detención del hombre ocurrió el jueves pasado a la madrugada, cuando fue aprehendido por provocar daños en el Hotel Fontainebleau, ubicado en Calle 3 y avenida Costanera, en San Clemente.
Fuentes locales afirmaron que Martínez se encontraba “alterado”, probablemente “bajo influencia de algún tipo de droga”. Fue enviado al hospital local, que decidió no atenderlo en primera instancia, por lo que la policía tomó el control total del caso sin verificar el estado clínico de la persona.
Tras la intervención de los agentes, fue demorado y trasladado a la Comisaría 3° de esa ciudad de la Costa Atlántica bonaerense. Al poco tiempo de arribar a la dependencia, Alejandro Martínez falleció, por lo que dieron aviso al fiscal Pablo Gamaleri, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 descentralizada de La Costa.
El funcionario judicial se presentó en la seccional y dispuso el traslado del cadáver a la morgue judicial de Lomas de Zamora por la mañana. Horas más tarde, la primera autopsia develó que el hombre había fallecido, como consecuencia de una “asfixia por sofocación”, y que además sufrió numerosos golpes en distintas partes del cuerpo.
Además, un testigo que también se encontraba detenido en la comisaría, relató a los investigadores que la víctima había llegado a la seccional “un poco exaltada”, lo que generó que los policías comenzaran a “apretarlo contra el piso”, para controlarlo, informaron fuentes judiciales.
A raíz de las pruebas recolectadas, el fiscal dispuso la aprehensión de los nueve policías bonaerenses con distintos grados de participación en el crimen de Martínez y once allanamientos, entre ellos de sus respectivos domicilios, que se concretaron en las últimas horas.
Según las fuentes judiciales, los policías deberán responder como autores materiales del homicidio, además de afrontar cargos por encubrimiento del hecho.
El fiscal Gamaleri tenía previsto indagar en las próximas horas a los efectivos por el delito de “homicidio agravado por ser cometido por un miembro integrante de la fuerza policial abusando de su función”.
Fuente Ambito
