A pocos días del estreno de su cuarta parta, es hoy una de las series más vista en muchos países alrededor del mundo y no es difícil imaginar que llegará una quinta parte ¿Pero que es lo que ha hecho “Cobra Kai” para despertar tanta admiración? ¿Es solo una cuestión de nostalgia? ¿O acaso la maquinaria hollywoodense, escasa de ideas, nos empuja a revisitar el pasado una y otra vez?
Lo primero a decir es que “Cobra Kai” es una excelente serie, parte de una historia conocida por el gran público, y le da una vuelta de tuerca más que interesante. Quién no a fantaseado y se ha preguntado, ¿Qué habrá sido de la vida de tal personaje ficticio? o ¿Cómo es que llego a determinada situación? “Cobra Kai” se nutre de estas preguntas, e intenta darnos algunas respuestas.
Ubicada cronológicamente 34 años después del torneo ganado por el joven Daniel LaRusso (Ralph Macchio) en “Karate Kid”, podemos ver cómo ha continuado la historia desde la perspectiva del antagonista Johnny Lawrence (William Zabka) ahora un hombre maduro a la que la vida ha golpeado mucho más fuerte que en sus días de karateca.
Quizás esto hace que funcione tan bien la serie: estamos ante una historia de redención que nos permite ver que no todo es blanco y negro, no existen solo buenos muy buenos y malos tan malos. Volvemos a ver como el camino de “Daniel San” y Johny Lawrence se cruzan, quienes fueran discípulos ahora son maestros. Desde sus propias experiencias y lidiando aun con sus pasados, intentaran mostrar el camino a una nueva generación de jóvenes afectados por sus propios conflictos adolescentes. Con aciertos y errores, pero siempre con intenciones sinceras y honestas, queda mucho por ver aun de esta historia.
¿Pero que le pasa a Hollywood con los ochenta y la nostalgia? Está pregunta no tiene una sola respuesta, en los últimos años, la meca del cine estadounidense ha revisitado una y otra vez la década: filmes, series, documentales, etc.
Películas tan disimiles como “Super 8” (2011) de J.J Abrams, “Guardians of the Galaxy” (2014) de James Gunn, o “It” (2017) de Andy Muschietti, entre otras han hecho recurso inspiracional a la década del VHS.
Desde la estética, la música, y en alguna de ellas, el tipo de protagonistas, grupos de niños embarcándose en algún tipo de aventura con tintes sobrenaturales. Esto último remite directamente a dos series “made in” Netflix que han sido de las más vistas en los últimos tiempos: “Stranger Things” (2016-) de los hermanos Duffer y la alemana “Dark” (2017-2020). Historias que no temen combinar ciencia ficción, terror, y un sinfín de referencias a filmes ochentosos, siempre buscando el guiño cómplice con el espectador.
Sin embargo y más allá de la década en cuestión, el fenómeno “nostalgia” se despega de a poco y cada vez es más frecuente que aquello que se añora es algo más cercano en el tiempo, un ejemplo claro de esto es el cine de superhéroes.
Actualmente “Spider-Man: No Way Home” rompe récords de taquilla alrededor del mundo y uno de los ganchos principales es revisitar sagas pasadas del arácnido utilizando el recurso del multiverso. Dicho recurso también lo veremos en la futura cinta de DC “The Flash”, la cinta a cargo de Andy Muschietti, traerá de regreso al Batman de Michael Keaton y a la versión del murciélago de Ben Affleck, un actor que hace muy poco había anunciado su retirada como el héroe de Ciudad Gótica.
Este fenómeno traerá muchas producciones para el 2022, la cuarta temporada de “Stranger Things” llegará a Netflix este año. Dos series ambientadas en el universo de Star Wars (otro gran muestra de cómo siempre hay más por contar) llegarán a Disney+, ellas son “Obi Wan Kenobi” y “Andor”. Además otra creación de George Lucas será revisitada por la plataforma de streaming, este año veremos una serie que continúe la historia de “Willow”, película fantástica de 1988.
Por si lo mencionado hasta ahora no fue suficiente, una de las películas emblemáticas de la década “homenajeada” llegará a las salas de cine este año: “Top Gun: Maverick”. Tom Cruise, de casi 60 años, vuelve a encarnar el personaje de un osado piloto de caza en la secuela de la cinta de 1986.
Evidentemente hay rentabilidad en la nostalgia, el recurso acompañado de una historia bien contada como es el caso (por ahora) de “Cobra Kai” ha demostrado que funciona. Mientras haya regalías, la maquinaria comercial ha de seguir revisitando, homenajeando y exprimiendo a una década que lo más jóvenes ven con simpatía, y los más grandes con la emoción de esos niños que algún día supieron ser.