Miami, 7 ene (EFE).- Los hijos de inmigrantes sufren problemas de salud mental y discriminación en la escuela, incluso desde el jardín infantil, según estudios realizados durante los años de la dura retórica antiinmigrante del expresidente Donald Trump y la llegada de la pandemia de la covid-19.
En Nueva York se encuestaron en el periodo 2018-1019 a 168 padres latinos de niños que acuden al jardín de infancia (con una media de unos 4,4 años) sobre los efectos en la salud mental de sus hijos de la retórica y amenazas de Trump hacia los indocumentados, en especial a los de origen mexicano.
Un 22 % de ellos respondió que los niños tenían dificultades para enfocarse en sus tareas en la escuela, comparado con el 4,3 % de los hijos de los padres no inmigrantes.
“La comunidad tenía miedo y eso se reflejaba en sus hijos pequeños”, declaró a Efe la doctora en psicología Rita Gabriela Barajas-González, profesora de la escuela de medicina Grossman de la Universidad de Nueva York (NYU).
“Ansiedad, falta de atención, el temor latente de una posible separación familiar eran entonces, y son todavía, manifestaciones latentes en todos los hogares donde hay un familiar con problema de estatus migratorio”, agregó la especialista, que realizó el estudio junto a siete colegas y que fue publicado recientemente en una revista especializada.
Los expertos animan a los educadores y profesionales que trabajan con niños de hogares de inmigrantes y latinos a utilizar enfoques basados en el trauma para fortalecer las habilidades socioemocionales de los niños y hacer frente a los factores estresantes que escapan a su control.
Esto significa escuchar y afirmar los sentimientos de los niños, enseñarles palabras sencillas sobre sentimientos y cómo reconocerlos en sus mentes y cuerpos.
Además, “hay que crear oportunidades de afirmación cultural en el aula para que los niños compartan sus historias a través del arte y el juego”, agregó la psicóloga, nacida en California e hija de mexicanos.
Según Barajas-González, el clima migratorio puede haber mejorado con la llegada del nuevo presidente, el demócrata Joe Biden, y sus promesas de cambio, pero “después de Trump que llamó asesinos y violadores a los inmigrantes de origen mexicano, vino la pandemia” y los efectos se hicieron sentir en la salud mental de estudiantes de secundaria.
Mencionó otra investigación, encabezada por Suniya Luthar, profesora emérita en Teachers College-Columbia University, que con la colaboración de tres colegas entrevistaron a 14.603 estudiantes en 49 escuelas de todos los Estados Unidos entre abril y junio de 2020.
Aquí se demuestra que, durante el cierre de las escuelas y la suspensión de las clases presenciales obligado por la pandemia, los estudiantes latinos registraron las tasas más altas de depresión y vulnerabilidad (el 24 % en 2020 comparado con el 3,7 % de 2018), mucho más que los blancos, afroamericanos o asiáticos.
Según el estudio, las elevadas tasas de depresión entre los estudiantes latinos se deben a experiencias de discriminación y racismo.
Un alumno de octavo grado declaró en la encuesta que sus compañeros de clase le decían que tenía que dejar de “hacerse el blanco”, volverse a su país, o que le van a denunciar antes las autoridades de inmigración.
“Los maestros lo escuchan, pero no hacen nada. Muchas veces pienso que sería mejor ser cualquier cosa, pero no mexicano”, agregó.
Otras preocupaciones de los estudiantes latinos en estos tiempos de pandemia son la salud y el trabajo familiar, agrega el estudio.
Fuente El Mundo USA