Prueben a salir a uno de los caminos que trasiegan por Castilla y León entre tierras de cultivo y, si no pueden salir de su ciudad, prueben en una de esas calles comerciales que las atraviesan. Una vez plantados en el escenario alcen la vista y miren a su alrededor, giren sobre ustedes mismos y vean y escuchen lo que ocurre sin más apriorismo que contemplar cuanto les rodea. Saquen sus conclusiones y valoren cuánto hay de bueno y de malo, cuánto de perversión o de bondad encierran las ovejas, las gentes, las restricciones y las libertades. Si se callase el ruido en esta campaña electoral, el 13 de febrero podríamos votar con la conciencia tranquila, la responsabilidad cumplida porque,… Ver Más
Fuente ABC