Resaltó, además, que la embarcación inició su ruta en aguas tunecinas y agregó que las primeras investigaciones apuntan a que los siete migrantes fallecidos, oriundos de Bangladesh, murieron de hipotermia, según medios italianos.
En este sentido, detalló que tres de los cadáveres fueron localizados en el interior de la embarcación, mientras que otros migrantes murieron a causa de su deteriorado estado de salud mientras eran trasladados a costas italianas por la Guardia Costera.
“Tres personas fallecieron durante la travesía, otras cuatro llegaron con hipotermia severa y fallecieron durante su traslado a la isla, tras haber sido interceptadas por los guardacostas italianos”, Informó el alcalde de Lampedusa, Toto Matrello a la agencia de noticias AFP.
“Lo que más sorprende es el silencio ensordecedor del gobierno italiano y de Europa, frente a estas muertes”, lamentó Martello.
Los 280 sobrevivientes, procedentes de Bangladesh, Egipto, Mali y Sudán, según el programa humanitario de las iglesias evangélicas italianas Mediterranean Hope, fueron enviados al centro de salud debido a encontrarse “en estado de hipotermia severa”.
Posteriormente fueron llevados al centro de alojamiento de la pequeña isla, que se encuentra más cerca de África que de Italia.
El centro, que tiene 250 plazas, acoge actualmente a más de 600 personas y se teme la llegada de más migrantes que huyen de las guerras y la pobreza.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) publica en su página web que en lo que va de año 50 personas murieron o fueron dadas por desaparecidas cuando intentaban cruzar el mar Mediterráneo para llegar a costas europeas, cifra que en 2021 ascendió a 2.043, por encima de los datos de 2020 y 2019.
El número de migrantes que llegaron a Italia se incrementó notablemente y pasó de 34.000 en 2020 a 64.500 en 2021.
A pesar de las temperaturas bajo cero y de un mar revuelto, cerca de 1.750 personas llegaron a Italia desde principios del mes, un número muy elevado en comparación con las 379 que desembarcaron el mismo mes del año pasado.
“La llegada de migrantes se ha convertido en un fenómeno permanente. No hay diferencia entre el verano y el invierno”, subrayó Martello.
El año pasado, la mayoría de los migrantes llegados a Italia partieron de Libia (31.556), unas 20.218 personas procedentes de Túnez, y 12.916 de Turquía.
Los migrantes interceptados en el mar y devueltos a Libia, que no es un puerto seguro, fueron 32.425, casi 3 veces más que el año pasado (11.891 en 2020), informó la OIM.
Fuente Ambito