El conflicto se inició el viernes 14 cuando, debido a un brote de Covid-19 entre 6 funcionarios de Aduana, Chile decidió hacer test de antígenos a todos los choferes que transitan ese corredor internacional, mientras que hasta el día anterior la modalidad era llevar un PCR negativo con un máximo de 72 horas de antigüedad y se hacían testeos de antígenos aleatorios.
Con el nuevo modus operandi, las horas de espera, que ya eran cuantiosas, se convirtieron en días, y ningún camión argentino cruzaba a Chile, y tampoco hubo cruce desde el vecino país hacia Argentina en las últimas dos semanas.
“Se comenzará con un testeo aleatorio a conductores de camiones que ingresen a Chile y se reforzarán las medidas de protección para los funcionarios de los servicios contralores que trabajan en la frontera”, precisaron en un documento difundido.
Los nuevos protocolos estarán vigentes hasta el próximo martes, ya que a partir del 2 de febrero en el complejo Los Libertadores les exigirán a todos los camioneros un PCR negativo realizado en un “laboratorio acreditado” y con un máximo de 48 horas antes del ingreso.
Aquellos que no cuenten con el análisis, deberán pasar por la prueba de antígenos.
Por último, las autoridades chilenas aclararon que se duplicarán los puestos de control para los transportistas, que pasarán de 7 a 14.
Fuente Ambito