
“Todos los indicios que tenemos es que están preparados para entrar en Ucrania, atacar a Ucrania”, agregó Biden, acusando al gobierno ruso de urdir una “operación de pretexto para tener una excusa para entrar”.
“Mi percepción es que eso sucederá en los próximos días”, señaló.
El secretario norteamericano de Estado, Antony Blinken, instó al gobierno de Vladímir Putin a “abandonar el camino de la guerra” y le exigió una declaración formal y oficial de que no tiene ninguna intención de atacar a su vecino.
En Naciones Unidas, donde el Consejo de Seguridad debía celebrar una reunión de crisis, la enviada de Estados Unidos afirmó que Washington quiere dejar claro que el riesgo de guerra en Europa va en aumento.
“Nuestro objetivo es transmitir la gravedad de la situación”, porque “este es un momento crucial”, declaró Linda Thomas-Greenfield antes de la reunión.
Rusia respondió a las propuestas presentadas por Estados Unidos sobre la seguridad en Europa, insistiendo en que no planea ninguna invasión y asegurando que se siguen ignorando sus reclamos principales.
“Si no hay disposición de parte de Estados Unidos de entendernos sobre las garantías jurídicas para nuestra seguridad, Rusia se verá obligada a actuar, sobre todo aplicando medidas de carácter militar y técnico”, indicó el Ministerio ruso de Relaciones Exteriores en su respuesta.
Asimismo, volvió a reclamar “la retirada de todas las fuerzas y armamento de Estados Unidos desplegados en Europa Central y Oriental, en Europa del Sureste y en los Países Bálticos”.
Rusia expulsó al número 2 de la embajada de Estados Unidos en Rusia, informó el Departamento de Estado.
Ucrania libra desde 2014 una guerra contra los separatistas prorrusos en el este del país, en las regiones de Donetsk y Lugansk. Un conflicto que ha costado centenares de vidas.
El ejército ucraniano acusó este jueves a los rebeldes de haber quebrantado el alto el fuego en 34 ocasiones, en 28 de las cuales se habrían utilizado armas pesadas.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, tuiteó que “el bombardeo contra un jardín de infantes por las fuerzas prorrusas fue una gran provocación”.
Sin embargo, las autoridades de la región de Lugansk, citadas por las agencias informativas rusas, acusaron a Kiev de los bombardeos.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, calificó los reportes de este jueves de “preocupantes”.
“Hemos dicho ya que los rusos podrían hacer algo como esto para justificar un conflicto militar. Así que vamos a observar esto muy de cerca”, dijo Austin tras una reunión en Bruselas con los ministros de Defensa de la OTAN.
Los países occidentales afirman que Rusia concentró más de 100.000 soldados cerca de la frontera con Ucrania, de cara a una posible invasión, algo que Moscú niega.
Fuente Ambito