MIAMI, Estados Unidos. — Pedro Luis Díaz Pelegrín es un custodio guantanamero de 61 años de edad que ha pedido en reiteradas ocasiones ayuda al gobierno para mejorar la situación constructiva de su vivienda.
El hombre reside con su esposa y su hijo en la callejuela de San Gregorio, una zona de la periferia sur de la ciudad cabecera provincial. Su vivienda presenta un deterioro visible: tiene las paredes —casi todas de madera— bastante deterioradas, el piso de tierra, el techo compuesto de pedazos de tejas de fibrocemento, no tiene un baño sanitario con las condiciones mínimas. La vivienda está casi al derrumbarse y, debido a su estado técnico, fue catalogada como inhabitable.
La familia asegura que no tiene capacidad financiera para afrontar la reparación de la casa. Han ido a todas las instancias gubernamentales —tanto provinciales como nacionales—encargadas de realizar esos trámites, sin que hasta ahora hayan recibido la ayuda solicitada.
“¿Qué tengo que hacer? Porque estoy cansado de ir al Poder Popular. Mi esposa, la madre de mis hijos, está también en esta gestión y nada. Se puede ver la situación de mi casa. No sé qué hacer”, expresó Díaz Pelegrín a CubaNet.
El deterioro del inmueble comenzó con el paso del huracán Sandy por el Oriente del país en el año 2012. El meteoro provocó el derrumbe de dos de las paredes de la sala y le llevó el techo en su totalidad. Debido a la humedad también se deterioraron los muebles y la única cama que tenían.
Como no tenían otro lugar donde ir, y gracias a la ayuda que le prestaron algunos vecinos, armaron nuevamente la casa con materiales improvisados que resolvieron.
En el año 2014, tras realizar algunos trámites con el delegado, le asignaron algunos materiales constructivos que, aunque no eran suficientes, les resultarían de gran ayuda. Sin embargo, nunca esos materiales. La familia Pelegrín aún conserva el papel de la asignación.
Como Pedro Luis y su familia no tenían posibilidad de realizar la reparación necesaria por sus propios medios, el deterioro de la vivienda continuó hasta llegar a la dura situación que presenta hoy.
“Hago esta denuncia porque necesito que mi vivienda tenga condiciones dignas para vivir como viven las personas, como viven los seres humanos, en condiciones dignas, con una buena cama, muebles donde sentarse, un baño donde bañarse, no tenemos ni baño. Vivimos en mal estado. Mi casa no tiene condiciones”, lamentó.
Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de WhatsApp. Envíanos un mensaje con la palabra “CUBA” al teléfono +1 (786) 316-2072, también puedes suscribirte a nuestro boletín electrónico dando click aquí.
Fuente Cubanet.org