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Por Laura Serra
De los 118 diputados que integran el Frente de Todos, 77 votaron a favor del proyecto y 28 lo rechazaron, entre ellos Máximo Kirchner; 13 se abstuvieron.
La Cámara de Diputados arrojó un veredicto contundente, esta madrugada, en la votación del proyecto que avala el financiamiento de la deuda con el FMI: de los 202 votos a favor de la iniciativa, poco más de un tercio provino del bloque del Frente de Todos. Conclusión: de no haber sido por el aporte de los distintos bloques de la oposición, la iniciativa habría quedado trunca y, en consecuencia, el país hubiese quedado más cerca del default.
Si se coloca la lupa más cerca sobre el resultado de la votación, se observa que. de los 118 diputados que integran el bloque oficialista, 77 (el 65%) dieron su respaldo a la iniciativa del Gobierno. La Casa Rosada y la cúpula del Frente de Todos esperaba un caudal un poco mayor (sus primeras estimaciones oscilaban entre 80 y 90 diputados votando favorablemente).
Sin embargo, la silenciosa prédica de Máximo Kirchner, que solo apareció en la sesión para votar en contra, tuvo su efecto: 41 diputados del espacio se negaron a respaldar –sea con su abstención o con su rechazo- el proyecto del Poder Ejecutivo. Toda una señal que avizora que, más temprano o más tarde, el bloque del Frente de Todos, comandado por Germán Martínez, va en camino de la ruptura.
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En las filas de Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados y principal negociador con los bloques de la oposición para la aprobación de la iniciativa, exaltaban el resultado de la votación. “Massa consiguió que con 77 votos de su propia fuerza el gobierno aprobara con más de 200 votos la ley más difícil desde la llegada del Frente de Todos al poder”, se vanagloriaban.
Paradojas de la política: pese a ubicarse en las antípodas del arco ideológico, con su rechazo Máximo Kirchner y los diputados oficialistas que lo acompañaron votaron de igual manera que Ricardo López Murphy (el único que se desmarcó de Juntos por el Cambio) y de los libertarios Javier Milei y José Luis Espert. También votaron en contra –como era previsible-, los cuatro diputados que integran los bloques de izquierda.
Los diputados del Frente de Todos que votaron en contra fueron 28 (24% del total del bloque): Juan Carlos Alderete, Constanza Alonso, María Cristina Britez, Lía Caliva, Nilda Carrizo, Lelia Chaher, Marcos Cleri, Gabriela Estévez, Emiliano Estrada, Federico Fagioli, Santiago Igón, Rogelio Iparraguirre, Máximo Kirchner, Florencia Lampreabe, Tomás Ledesma, Mónica Macha, Gisela Marziotta, Lucila Masin, Magalí Mastaler, Leopoldo Moreau, Alejandra Obeid, Paula Penacca, Agustina Propato, Rodolfo Tailhade, Marisa Uceda, Lucio Yapor, Carolina Yutrovic y Natalia Zaracho.
Se registraron 13 abstenciones, todas del Frente de Todos: Lisandro Bormioli, Pablo Carro, Daniel Gollan, Gustavo González, Itai Hagman, María Rosa Martínez, Claudia Ormachea, Sergio Palazzo, Carlos Ponce, Vanesa Siley, Jorge Verón, Hugo Yasky y Natalia Zabala Chacur.
Fuente La Nación
