
El medio de comunicación estatal ruso RIA ahora informa que 20 personas (el mínimo requerido en Rusia para una demanda colectiva) ya se han unido a la acción legal contra el transmisor con alrededor de cien personas más solicitando unirse.
Netflix acumuló aproximadamente un millón de suscriptores desde su lanzamiento en Rusia en 2016. La suscripción en Rusia es de 799 rublos (u$s9.67) por mes.
Los demandantes están representados por el bufete de abogados con sede en Moscú Chernyshov, Lukoyanov and Partners. Según RIA, el caso de la firma es que Netflix “celebró un contrato público con suscriptores que no contempla la posibilidad de negativa unilateral a cumplir obligaciones”.
De esta manera, la suspensión del servicio de streaming vulnera los derechos de los usuarios y constituye una violación del código civil de la Federación Rusa, así como de las leyes de derechos del consumidor.
Los demandantes buscan una compensación de 60 millones de rublos (aproximadamente u$s730,000) por daños no pecuniarios, así como una multa contra Netflix equivalente a la cantidad otorgada por el tribunal. Se podrían imponer sanciones adicionales si la plataforma pierde el caso y se niega a cumplir con las órdenes compensatorias.