Alfonso Rueda ha optado por un acto sin grandes fastos, sobria, pero con la solemnidad que la investidura de un presidente de la Xunta merece. Se descartó, como era habitual en otras tomas de posesión, ponerle el pomposo broche de una ceremonia en la plaza del Obradoiro. Pero se abrieron las hojas, eso sí, de la imponente puerta principal del Parlamento gallego, la que solo se abre en las grandes ocasiones. Y la lista de asistentes que entró por ella también ha estado a la altura. Acudió la vicepresidenta segunda del Gobierno, la gallega Yolanda Díaz; el expresidente del Gobierno, también gallego, Mariano Rajoy. Y los tres insignes mandatarios regionales populares de la Comunidad de Madrid, Castilla y León y Murcia: Isabel Díaz Ayuso, Alfonso Fernández Mañueco y Fernando López Miras, respectivamente, que secundaron al nuevo presidente de la Xunta. Daban a Rueda la bienvenida al ‘club’ de los presidentes autonómicos populares: «Nos tiene a su disposición para seguir impulsando magníficas relaciones con Galicia». La frase es de Mañueco, ante la prensa en una breve ronda de declaraciones a las puertas del Parlamento gallego después de la investidura. Pero Ayuso y López Miras han usado palabras similares para ‘apadrinar’ a Rueda como nuevo miembro del ‘club’ autonómico, y también sobre la futura colaboración entre sus respectivas regiones y Galicia, que ya era fluida durante el mandato de Alberto Núñez Feijóo. La presidenta madrileña, que había llegado ya el viernes a Santiago y se había dado un paseo por el casco viejo compostelano, constató hablando con la gente que es un momento «agridulce» para los gallegos, con la marcha de Feijóo a Madrid. Pero que Galicia queda en buenas manos. Alabó a Rueda, «un hombre muy trabajador, muy comprometido y muy buena persona», como un recambio de garantías ponerse al frente de la Xunta: «Los gallegos van a tener un gran presidente, que se desvive por Galicia, que tiene su personalidad definida y que hará un excelente trabajo». En la misma línea, el presidente murciano constató que, pese a que Feijóo ha dejado «el listón muy alto», Rueda es un presidente de garantías, que tendrá en él a «un aliado leal». Y Feijóo, líder de PP estatal y ya expresidente de la Xunta, también ha dado la bienvenida «al sexto presidente de la Xunta», a quien ha querido enviar «un cariñoso abrazo». «Galicia disfrutará de un nuevo presidente con muchísima experiencia política, experiencia de gobierno, que seguro será aprovechada por los gallegos», ha añadido Feijóo. A Rueda simplemente le ha querido pedir «trabajo, dedicación, compromiso y poner a Galicia siempre por encima de todo, porque eso es compatible con los intereses de España». Feijóo cede a Rueda su asiento en el ‘club’ de los presidentes autonómicos populares.
Fuente ABC