La banda criminal ETA, esa que dicen que ya no existe, asesinó a 869 personas -e las que no se sabe quiénes fueron los autores de 379 muertes-, e hizo sufrir colectivamente a todos los españoles durante medio siglo. También subyugó y lo sigue haciendo a los que hicieron posible su supervivencia y ahora trabajan por su redención con la colaboración activa de los gobiernos de la autonomía vasca y de la Nación. Y esa redención, ya casi consumada, exige como condición irrenunciable que los matarifes dejen de serlo, que se conviertan en personas respetables y admiradas por los suyos mientras los demás miran para otro lado, indiferentes, cansados o conformes porque la paz exige cesiones y olvidos. Así que… Ver Más
Fuente ABC