
“Nuestro cuerpo está muy adaptado para mantener una temperatura corporal estable, algo de lo que depende nuestra vida”, afirmó el autor principal, Kelton Minor, de la Universidad de Copenhague.
Quienes son especialmente vulnerables a la pérdida de sueño por el aumento del calor son los ancianos, las mujeres y los habitantes de los países de bajos ingresos, así como de las regiones más cálidas.
Los que no tienen acceso al aire acondicionado o a otras herramientas para controlar el aumento de la temperatura de su hogar serán los que más sufran, lo que aumenta las desigualdades causadas por el cambio climático en todo el mundo.
“Para tomar decisiones informadas sobre la política climática en el futuro, debemos tener más en cuenta todo el espectro de impactos climáticos futuros plausibles que se derivan de las opciones de emisiones de gases de efecto invernadero de la sociedad actual”, propuso Minor.
¿Cuál es la importancia de un buen descanso?
El sueño es una función necesaria que afecta tanto a la salud física como mental de una persona. El sueño ayuda a mantener la salud del sistema inmunitario, la cognición, la atención y el estado de ánimo y comportamiento.
A su vez, la falta de sueño deteriora la salud mental y física de una persona, provocando problemas cardiovasculares, depresión, ira e incluso puede provocar una muerte prematura.
Fuente Ambito