El presidente Joe Biden había anunciado poco antes en Twitter que un avión “cargado con más de 70.000 libras (más de 31 toneladas, NdE) de leche de fórmula (…) está a punto de aterrizar en Indiana”.
“Un vuelo partió durante la noche desde la Base de la Fuerza Aérea de Ramstein, en Alemania, lleno de leche en polvo para bebés, y aterrizará en Indiana por la mañana (del domingo), dijo el asesor económico de la Casa Blanca Brian Deese al canal CNN.
El avión transportaba el producto de la marca Nestlé.
Otras entregas de leche en polvo “llegarán a principios de semana” en otros vuelos, agregó.
Estados Unidos vive desde hace varios meses una escasez de leche infantil provocada por problemas de abastecimiento y laborales vinculados a la covid-19 y agravada luego por el cierre de una fábrica de la empresa Abbott, en Michigan, luego que algunos de sus productos fueron sospechados de haber provocado la muerte de dos bebés.
La agencia estadounidense de medicamentos (FDA) exculpó a la leche “483”, pero descubrió irregularidades relacionadas con la fábrica, indicó Abbott el viernes, resaltando que “comenzó inmediatamente a llevar a cabo acciones correctivas”.
El riesgo de las recetas caseras
Ante la escasez de leche en polvo para bebés en Estados Unidos algunos padres han recurrido a fórmulas caseras publicadas en redes sociales, pero pediatras desaconsejaron esas alternativas pues carecen de vitaminas y nutrientes clave para los pequeños.
Una receta, que se dice data de la década de 1960, se ha compartido cientos de miles de veces en Facebook y consiste en mezclar leche evaporada, agua, y jarabe de maíz Karo.
Los padres de Estados Unidos afirman que las restricciones de compra y el alza de precios los dejan cada vez más desesperados por conseguir los alimentos necesarios para los bebés que no son amamantados. Pero la Academia Americana de Pediatría (AAP) advierte del peligro de las fórmulas caseras.
Tanya Altmann, autora de varios libros sobre paternidad y fundadora del centro médico Calabasas Pediatrics en California, está de acuerdo.
“Yo aconsejo a mis pacientes no hacer fórmulas caseras de leche para bebés”, dijo Altmann a la AFP. “Eso no va a darles los nutrientes esenciales necesarios, puede ser peligroso para su crecimiento y desarrollo, e incluso puede enfermarlos”.
Mirando la receta que circula en línea, Altmann dijo que agregar azúcar no es sano ni seguro para los bebés.
“El jarabe Karo se usó alguna vez para ayudar a aliviar el estreñimiento, pero no se recomienda ya que no es efectivo e incluso puede tener bacterias peligrosas”, según la experta.
Azza Ahmed, una profesora asociada de enfermería en la universidad de Purdue, dijo que la fórmula casera puede poner en riesgo a los bebés por “contaminación e infección”.
Y aunque los padres se sientan estresados por la escasez, la fórmula no debe diluirse, pues puede llevar rápidamente a un desbalance nutricional, agregó.
En redes sociales, los mensajes producto de la escasez, también dicen que el jugo de naranja mezclado con agua puede ser suministrado a las tres semanas de nacidos.
Pero la Academia de Medicina de la Lactancia Materna advierte en contra de esta práctica y de otros sustitutos de las fórmulas. “No dé a su bebé de menos de seis meses ningún té o jugo”, advierte la entidad.
Fuente Ambito