
Uno de los puntos de entrada al metaverso son los avatares, un personaje gráfico que los usuarios podrán crear para representar su identidad y cultura. La particularidad que remarcó Meta sobre este proceso es que habrá “quintillones de combinaciones” que se podrán elegir para que sea lo más representativo posible.
“Desde quien usa un implante coclear, tiene un corte de pelo determinado o está en silla de ruedas”, ejemplificó Maxine Williams, vicepresidenta de Diversidad de Meta. Aquellos avatares están en 3D y se podrán usar también como foto de perfil en Facebook e Instagram, anunció la red social.
Además, Meta trabaja en la diversidad lingüística para que todas las lenguas de América Latina estén presentes dentro del metaverso. Incluirá el guaraní, el aymará y el quechua.
Williams remarcó que el celular será también parte del metaverso como dispositivo de entrada, teniendo en cuenta que los cascos de realidad virtual son más costosos o inaccesibles en algunas partes del mundo.
El metaverso “no es una alternativa al mundo físico”, aclaró Shah, sino un mundo digital interconectado, que une la realidad virtual y la realidad aumentada, junto con plataformas más familiares como el smartphone y las computadoras. Para el directivo, el metaverso alcanzará su consolidación en una década.
Consultado sobre cuáles son las garantías de seguridad y protección para quien ingrese a ese mundo, Shah calificó esta cuestión como “fundamental” y se refirió a la implementación de un “protocolo para el límite personal”, compuesto por una serie de controles que la persona podrá configurar para permitir hasta qué distancia se le puedan acercar extraños.
Contó también que están desarrollando una forma de control de voz para que la persona decida quién puede y quién no escucharla dentro del metaverso. “Todas las lecciones que aprendimos también las estamos incorporando en forma de seguridad, como la forma en que las personas se comunican y cómo son los contenidos”, relató el directivo sobre su experiencia en Facebook, compañía que atravesó diversas crisis por la protección de datos personales de sus usuarios.
Meta trabaja con la Organización de Estados Americanos (OEA) para ofrecer -a través de cursos sin costo y de realidad aumentada– formación laboral y desarrollo de habilidades a estudiantes, creadores y propietarios de pequeñas empresas.
Los cursos se dividen en tres niveles de experiencia para apoyar a los creadores emergentes y establecidos. Los dos primeros, la formación para principiantes “Spark AR Quickstart” y el nivel medio “Spark AR Fundamentals”, ya están disponibles.
El módulo avanzado “Spark AR Pro Course” se lanzará el 30 de septiembre, junto con el programa “Certified Spark AR Creator”, que permitirá a los creadores de toda la región solicitar un certificado.
Fuente Ambito